UN SUCESOR 100% ELÉCTRICO
El Lexus LFA es uno de los grandes superdeportivos de los últimos años, dejando una huella imborrable en muchos aficionados de la marca japonesa. El LFA va a regresar, aunque lo hará en formato eléctrico. Eso sí, lo hará con todo tipo de innovaciones entre las que se incluyen...un cambio manual.
Hace ya un tiempo, concretamente en 2010, Lexus sorprendió al mundo con la presión de la versión definitiva del Lexus LFA, una suerte de "sueño dorado" de la marca japonesa en formato de superdeportivo equipado con un motor V10 atmosférico del que muchos aún recuerdan hoy su sonido. Una auténtica obra de la ingeniería, construida a mano, de la que sólo se construyeron 500 unidades a razón de casi medio millón de euros por cada una. Su valor actual es mucho más alto, y algunas unidades ya han cambiado de dueños por más de un millón de euros.
Sin embargo, y pese a seguir siendo una de las grandes creaciones de Lexus, lo cierto es que los tiempos cambian y el planteamiento de Lexus para el presente y el futuro pasa por la electrificación. El mejor ejemplo de ello lo encontramos en su nuevo SUV, el Lexus RZ, 100% eléctrico, y en el Lexus Electrified Sport, el deportivo que ilustra este artículo y que prefigura la que será la segunda generación del Lexus LFA.
Sí, habrá una segunda generación del Lexus LFA, pero se parecerá poco a su antecesor. Para empezar, y como ya hemos mencionado, será 100% eléctrico. Tendrá eso sí unas prestaciones descomunales, ya que se espera una cifra de potencia que no bajará de 600 CV, con una dinámica de conducción de primer orden. Por otro lado, el Lexus LFA eléctrico será el encargado también de estrenar una configuración mecánica inédita hasta la fecha: una nueva caja de cambios...¡manual!
El futuro Lexus LFA llegará con un cambio manual
Así, como suena: un Lexus con cambio manual. Pero no un Lexus cualquiera, sino un Lexus con motor eléctrico y prestaciones de superdeportivo. ¿Cómo es posible? Fácil: tiene truco, mucho truco.
Y es que en Toyota (Lexus) están trabajando en un cambio manual para sus modelos eléctricos más prestacionales, un cambio manual que tiene pomo de marchas e, incluso, pedal de embrague. Según el fabricante, podrá ser posible incluso llegar a calar el coche.
Pero en realidad se trata de un sistema que no emplea una transmisión mecánica como tal, sino que simula el funcionamiento de una caja de cambios manual a través de un selector (el pomo) que replica los enclavamientos típicos de un selector en H como el que todos utilizamos en nuestros cambios manuales y un pedal de embrague, apoyándose en un software para "crear" los diferentes saltos de revoluciones que existen entre cada relación.