VUELVEN LOS INTENTOS DE ESTAFA
La llegada de internet a nuestros días también se ha hecho patente en los trámites de tráfico, una 'puerta abierta' que los estafadores intentan aprovechar para hacerse con nuestros datos y con nuestro dinero. El Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe) nos advierte de ello.
Internet ha revolucionado la manera en la que nos comunicamos, nos relacionamos e, incluso, la manera en la que realizamos diferentes gestiones con las administraciones. Una de esas administraciones es la Dirección General de Tráfico, un órgano que cuenta con una Sede Electrónica que no para de ampliar sus funciones: a día de hoy ya se pueden realizar más de 30 tipos de gestiones diferentes relacionadas con nuestros permisos de conducción y con nuestros vehículos.
Uno de los trámites más comunes es el pago de multas de tráfico, una gestión que por otro lado se puede llevar a cabo también por teléfono. En cualquier caso, la posibilidad de llevar a cabo ciertos trámites mediante internet ha hecho que los ladrones encuentren en ello una posible 'puerta abierta' con la que intentar estafar a los ciudadanos, haciéndose con sus datos personales e, incluso, consiguiendo acceder a sus cuentas bancarias.
Es precisamente el aviso que nos llega desde el Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe): se está detectando un aumento de amenazas relacionadas con el robo de datos personales a través de la técnica conocida como phishing, de manera que los malhechores están suplantando la identidad de la Dirección General de Tráfico (DGT) para intentar hacerse con los datos personales de los ciudadanos.
Vuelven las estafas: se están haciendo pasar por la DGT
En concreto, esta estafa consiste en el envío de un correo electrónico fraudulento en el que informan al destinatario de que tiene una multa sin pagar, pidiendo que se descargue un documento adjunto que se ha enviado junto al texto. Si el destinatario accede y descarga el documento adjunto habrá caído en la trampa: en el documento se encuentra un virus que automáticamente se almacena en el ordenador, recopilando de manera oculta y silenciosa todos los datos personales del usuario.
Para evitar caer en la trampa debemos tener en cuenta siempre una serie de consejos y características de los correos y comunicaciones oficiales remitidas por la DGT:
En el caso de que hayamos accedido y hayamos descargado el archivo adjunto, deberemos actuar con rapidez: es importante no ejecutar ningún programa que utilice nuestros datos personales. Además, deberemos hacer un análisis profundo del sistema a través de un programa antivirus y, en caso de no estar seguros de haber eliminado la amenaza, proceder al borrado y formateo completo del ordenador.