SIEMPRE RESPETANDO LOS LÍMITES DE VELOCIDAD
En ésta época del año los desplazamientos por carretera se multiplican, y con ellos la exposición de los conductores a uno de sus mayores enemigos: los radares de velocidad. Buena parte de ellos están operativos las 24 horas, pero no todos...
Es evidente, y nadie se atreve a negarlo: la mortalidad en carretera está íntimamente ligada a la velocidad de circulación, o más concretamente, al exceso de velocidad. Nuestros coches son cada vez más seguros y cómodos, pero las personas que los utilizan aún siguen siendo la pieza más débil de todo el engranaje vial. Por eso, las autoridades combaten con intensidad estos comportamientos, haciendo que cada vez sea más difícil exceder los límites de velocidad.
Por otro lado, la vigilancia "telemática" de los vehículos que circulan por carretera es cada vez más efectiva: a los radares fijos y móviles que todos conocemos se suman cada vez más métodos de control como las cámaras para vigilar el uso del teléfono móvil, el uso del cinturón de seguridad o la vigencia de variables administrativas como el seguro o la ITV. Para todos aquellos conductores que desean viajar con más tranquilidad durante estas fechas, sin preocuparse tanto por la presencia de métodos de vigilancia, existen horas en las que es más difícil encontrarse con ellos.
Como es lógico, la propia Dirección General de Tráfico ofrece a sus ciudadanos una completa base de datos en la que es posible consultar la ubicación de todos los radares, tanto fijos como móviles, que están operando en nuestra ruta por carretera. Además, con motivo de los desplazamientos extraordinarios de verano, la DGT ha hecho públicos los horarios en los que prevé un mayor volumen de tráfico y, por tanto, será más fácil encontrarse radares funcionando.
Se trata de las horas centrales del día, descartando las iniciales de la mañana: si quieres desplazarte por carretera con mayor tranquilidad, con menos radares y también con menos tráfico, prueba a hacerlo a primera hora de la mañana o, incluso, si tu coche está equipado con un buen sistema de iluminación, por la noche. La circulación es más tranquila, las temperaturas más suaves y el índice de vigilancia de velocidad menor, aunque por contra es más probable que encuentres otros tipos de controles, como de alcoholemia o de drogas.