A partir del próximo mes de enero se pondrán a la venta en los principales mercados europeos los con motor diésel asociados a la tracción total Quattro. Es una combinación que conocíamos de la generación pero que hasta ahora no estaba presente en la actual. La tracción total Quattro hace uso de un embrague multidisco. En condiciones normales envía toda la fuerza al eje delantero pero si percibe pérdidas de adherencia acto seguido reparte el par al eje posterior, garantizando una pisada más segura.
El motor elegido ya lo conoces muy bien.
Se trata del 2.0 TDI con 184 CV de potencia que también emplean los Volkswagen Golf, SEAT León y Skoda Octavia entre otros muchos modelos de VAG. Destaca por sus bajos consumos y buenas prestaciones.
Obligatoriamente ligado al cambio de doble embrague S-Tronic, este modelo declara una aceleración d
e 0 a 100 km/h en 6,7 segundos y una velocidad máxima de
234 km/h, todo ello acompañado de un consumo medio de 5,2 L/100 (datos válidos para el Coupé; el roadster tiene unos registros ligeramente más pobres).
De momento los precios recomendados no han sido facilitados para el mercado español aunque posiblemente antes de que termine este año 2016 tengamos las cifras. Lo que sí podemos decirte ya es que
en Alemania arrancarán en los 41.250 € en el caso del coupé, y en los 43.650 € si hablamos del roadster.