Quedan todavía muchas preguntas que resolver en cuanto al futuro de la conducción autónoma. Ya no sólo todo lo que implica la convivencia entre
coches tripulados por seres humanos y coches dirigidos por ordenadores, sino también todo lo que se refiere a las infraestructuras relacionadas. Algo tan sencillo como conducir hasta el
drive-in más cercano para comprar tu cena sin ni tan siquiera bajar el coche, obligará no sólo a
alguna que otra línea de programación extra, sino también a que la tecnología de dichos establecimientos sea modificada. Otro de los ejemplos habituales en
nuestro día a día es precisamente el del pago en los peajes. Mientras que los transportistas y profesionales que utilizan en su día a día dichas vías puede utilizar el
Telepeaje, el resto de usuarios solemos proceder al pago en las cabinas automáticas o atendidas por los trabajadores que hay situadas en cada peaje. Esta sencilla acción en nuestra conducción
obligará a los técnicos y programadores a trabajar para adaptar la inteligencia artificial a encontrarse con un ‘obstáculo’ de este tipo. Citroën ya ha dado ese paso y ha llevado por primera vez a una de
sus unidades de nivel 4 (
mind off – sin supervisión del conductor) por una de las autopistas francesas sin necesidad de la intervención del conductor a la hora de llegar al peaje de
Saint-Arnoult-en-Yvelines. Concretamente, se utilizó el Citroën C4 Picasso en el que, entre otros, se han montado personalidades como el nueve veces Campeón del Mundo de Rallies, Sébastien Loeb o el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo. El programa de desarrollo de este sistema, el cual se inició en 2016 en colaboración entre el
Grupo PSA y VINCI Autoroutes, consiguió llevar a cabo de manera satisfactoria la comunicación entre la IA del vehículo y la infraestructura (había una antena UBR situada a 300 metros de las barreras), la cual,
una vez detectado el vehículo autónomo circulando hacia el peaje y después de confirmar que no había otro vehículo cambiando de carril que le precediera. También se tuvo en cuenta que en las cercanías del peaje no existen marcas viales en la calzada y por tanto el vehículo debe considerar otras referencias para su guiado a través del sistema Safe Stop.