Los servicios conectados en los automóviles son una herramienta que gana en adeptos y posibilidades con cada nueva función presentada. El concepto de
coche conectado es ya una realidad, y prueba de ello es que son ya muchos los vehículos que permiten acceder a sus datos vía teléfono móvil o dispositivo conectado a internet.
¿Pero hasta dónde pueden llegar estas funciones? Para demostrar cuán útil pueden llegar a ser estas funciones nada mejor que un hecho sucedido en Seattle según explica
CNET. Un BMW Serie 5 de la anterior generación había sido aparcado en un garaje, con las puertas sin bloquear y con las llaves dentro. Este hecho fue un verdadero llamamiento para los ladrones, algo que no tardó en suceder haciendo que un ladrón se interesase por el BMW para llevárselo consigo.
Al descubrir el conductor que el BMW que había aparcado ya no estaba, éste se percató de que el vehículo equipaba el paquete BMW ConnectedDrive que ofrece un sinfín de funciones, y entre ellas está la de localización remota del vehículo. Una vez puesto en contacto con el servicio de asistencia,
desde BMW procedieron a inmovilizar el coche, bloquearon las puertas dejando atrapado al ladrón dentro y avisaron a la policía para que acudiera con las coordenadas exactas del vehículo. Hablamos de un final feliz a todas luces para un descuido que pudo salirle muy caro al conductor del BMW Serie 5, pero que igualmente nos hace recordar que nuestro coche "conectado" posee el riesgo de ser manipulado por un tercero de una forma relativamente sencilla. En Centímetros Cúbicos: |