PARA LOS VEHÍCULOS DAMNIFICADOS CON MENOS DE 10 AÑOS O 175.000 KM
El grupo ha tomado una medida para abordar los problemas de desgaste prematuro en sus motores PureTech. Ahora, los propietarios disfrutarán de una garantía retroactiva de 10 años o 175,000 km.
Aunque los motores PureTech han estado en producción durante casi 12 años, y han sido premiados en varias ocasiones como “Motor del Año”, en los últimos meses estas alegrías se han convertido en un quebradero de cabeza para el grupo Stellantis.
El problema se encuentra en la correa de distribución húmeda que con el paso del tiempo y los kilómetros comienza a desintegrarse, lo que crea problemas dentro del propio motor del vehículo. Por ello, los motores 1.0 y 1.2 EB PureTech de Stellantis han experimentado un desgaste prematuro, lo que ha causado numerosas averías para los clientes de algunas de las marcas del grupo, sobre todo en los vehículos de las marcas Peugeot y Citroën.
Este desgaste prematuro se debe, en parte, a que la correa se descompone debido a la contaminación presente en el aceite, que se mezcla con el resto del combustible. Esto es especialmente notable en los vehículos que realizan muchos trayectos cortos, ya que al disolverse, la correa libera ciertas partículas que obstruyen los conductos de lubricación. Lo que provoca una pérdida de presión del aceite, y el motor puede romperse debido a la falta de lubricación.
Stellantis ha presentado una nueva solución para acabar con este problema, ampliar la garantía de los motores PureTech de manera retroactiva a 10 años o 175,000 km. No es la primera vez que una marca de vehículos ofrece una garantía retroactiva para algunos de sus productos, como hace Dacia, pero sí es la primera vez que lo hacen para la motorización de su gama.
Sin embargo, no todos los motores de este tipo estarán cubiertos por este cambio. El grupo considera que los motores PureTech de tercera generación, producidos a partir de junio de 2022, no presentan este tipo de problema.
Hay una condición importante, Stellantis solicitará a todos los propietarios de vehículos del grupo (independientemente de la marca) que demuestren que se han realizado los mantenimientos y servicios oficiales del coche. Esto puede ser en el servicio oficial de la marca o en el taller de elección del propietario, pero debe quedar documentado que se ha llevado a cabo dicho mantenimiento.
Para los motores afectados que aún no han sufrido daños, se ha optado por reemplazar la correa de distribución con una versión reforzada. En enero pasado, Stellantis anunció que los motores PureTech anteriores a su tercera generación, en los que se han corregido los problemas con correas reforzadas o cadenas de distribución (en el caso de los modelos mild hybrid), estarían cubiertos por una garantía completa de cinco años o 100,000 kilómetros.
Además, entre el quinto y el octavo año, y entre 100,000 y 150,000 kilómetros, la garantía cubriría los costos de las piezas.