BUENAS NOTICIAS PARA LOS CAMIONEROS
Gracias a los nuevos camiones autónomos los conductores conducirán tan solo el 62% del tiempo, abriendo la posibilidad a la mayoría de ellos de dormir en sus hogares.
La profesión de camionero en la mayoría de los países está en riesgo. Actualmente, en España, este sector se encuentra con una clara ausencia de relevo generacional. Más de la mitad de los de los titulares con carnet clase C+E tienen una edad superior a los 50 años. Incluso hasta 10.000 ofertas de empleo quedan vacantes por ausencia de candidatos.
Uno de los mayores problemas a la hora de desempeñar este trabajo es la gran cantidad de horas que estos profesionales se encuentran fuera de sus casas. Una dificultad que hace que muchos jóvenes prefieran un empleo peor remunerado, pero cercano a sus familiares y amigos. Ante esto, la tecnología plantea una nueva vía que puede hacer más atractiva la opción de trabajar como camionero.
Roland Beguer, una consultora mundial, presentó unos cálculos y predicciones de cara a lo que se avecina en el sector. Cada vez más expertos ven próxima la llegada de los camiones autónomos. No obstante, también están de acuerdo en que estos no podrán trabajar las 24 horas del día sin ayuda del conductor. De hecho, desde la mencionada consultora ven inviable realizar la carga y descarga de la mercancía sin el factor humano.
La compañía propone un sistema donde los pilotos automáticos se encargarán de cubrir distancias superiores a los 300 kilómetros y un humano entrará en la cabina al principio y al final cada ruta. De este modo, los pilotos automáticos pasarían a representar el 38% del tráfico de camiones existentes actualmente en Estados Unidos, lo que dejaría un 62% en manos de los conductores.
El mayor cambio con la aparición de estos camiones autónomos sería el trabajo humano, que pasaría a ser principalmente de carácter local. En resumen, la mayoría de los conductores podrían dormir en sus propios hogares aunque sus tareas diarias pasarían a ser más intensas, consistiendo en realizar maniobras o circular por vías de una categoría inferior.
Este nuevo sistema modificaría los acuerdos existentes entre los fabricantes de vehículos y los transportistas. Ante este nuevo escenario, las empresas de transporte, además de pagar el propio vehículo, tendrían que liquidar cuentas con el fabricante por cada kilómetro recorrido de forma automática. A cambio, el fabricante deberá supervisar las cámaras, los radares y el software.