¿El mejor de su categoría?
Mercedes-AMG por fin ha puesto en juego al nuevo SL, un esperado modelo que llega a un mercado donde se encuentra con duros rivales pero, ¿cuáles son?
En los últimos coletazos de vida de la anterior generación del Mercedes-Benz SL ya vimos indicios de que, tal vez, su renovación no iba a tener lugar. Así nos lo demostró la firma de la estrella después de años de hibernación para su descapotable más lujoso. Pero ha sido ahora, a finales del año 2021, cuando el Mercedes-AMG SL ha vuelto a escena más fresco y tecnológico que nunca con una dura misión por delante: convertirse en el mejor descapotable del mundo. ¿El problema? Numerosos rivales dispuestos a complicarle la tarea.
Y es que el SL recoge un alto legado gestado por emblemáticos vehículos que consiguieron, de mejor o peor manera, ganarse un puesto entre los descapotables de lujo. Ahora, pese a que el objetivo es el mismo, AMG se ha encargado de darle un toque más deportivo y radical sin perder su condición de GT, pero veamos qué ofrecen sus competidores más directos.
Bentley Continental GT Convertible
Si pensamos en un coche que sea una fiel oda al lujo se nos viene a la mente, directamente, el Bentley Continental GT, rival directo del SL en su versión Convertible. Puede que el inglés sea una apuesta más refinada que abogue por el confort y, tal y como indica su nombre, su concepto sea más propio de un GT y no de un deportivo.
Aún así, no podemos pasar por alto el pasado de GT del que también goza el SL, y cuya generación actual seguramente también se mantenga fiel a este. Sea como fuere, el Continental GT recurre a un V8 sobrealimentado por turbo que eroga 549 CV y 770 Nm de par, cifras muy parejas a las del Mercedes-AMG SL 65.
Porsche 911 Turbo Cabrio
El Porsche 911 se ha labrado a lo largo de los años el puesto de uno de los mejores deportivos de la historia, y eso no es menos en su actual generación. Con esta premisa, el apellido Turbo del 911 no solo se encarga de proporcionarle la categorización de ser uno de los más rápidos de la gama, sino también por combinarlo con un amplio confort a diferencia de los GT3 y GT3 RS.
Así, encontramos en el Porsche 911 Turbo Cabriolet un digno rival del nuevo Mercedes-AMG SL. ¿Sus credenciales? Un seis cilindros bóxer turbo de 3.7 litros capaz de producir 580 CV y 750 Nm de par.
BMW M850i Cabrio
Aunque bien es cierto que en la gama del BMW Serie 8 existe el M8 Competition, hemos considerado que es demasiado radical para compararlo justamente con el nuevo SL, al menos hasta que no llegue una hipotética variante Black Series o híbrida enchufable de aún más potencia. De esta manera, creemos que el rival más directo por parte de BMW es el más equilibrado M850i Cabrio.
Detrás de este sugerente apellido se esconde un descapotable deportivo y apto para llevar a cuatro pasajeros con comodidad, al menos a los de las plazas delanteras. Además, el M850i cuenta con un exultante V8 biturbo de 4.4 litros que desarrolla 530 CV y 750 Nm de par.