UN HÍBRIDO ENCHUFABLE CON 680 CV
Berlina o familiar, la versión tope de gama de la Clase C, desarrollada por la división deportiva de la marca, es sencillamente carísima.
El Mercedes-AMG C 63 S E Performance es la versión tope de gama del Clase C, es decir, la berlina de tamaño mediano (4,84 metros de longitud) de la marca alemana, aunque también se vende con una carrocería de tipo familiar denominada Estate (cinco puertas en lugar de cuatro). Este vehículo de altísimas prestaciones se caracteriza por funcionar mediante un sistema de propulsión híbrido enchufable que, en conjunto, rinde hasta 680 CV de potencia y 1.020 Nm de par. Además, lleva mucho equipamiento y opta a componentes propios de un superdeportivo.
En julio de 2023, su fabricante ha publicado sus precios para España y lo cierto es que sorprenden, pero no para bien. A excepción del BMW M3 CS, cuya producción está limitada, el AMG en cuestión es el producto más caro de su categoría: la berlina cuesta 140.800 euros, mientras que el familiar vale 142.830 euros. La variante con mayor maletero (320 litros en lugar de 280, aunque las dos son malas cifras) no tiene rival directo, pues tanto para obtener un BMW M3 Competition Touring (510 CV) como para adquirir un Audi RS 4 Avant (450 CV) se han de pagar entre 20.000 y 40.000 euros menos. También son “rancheras” sin ningún tipo de hibridación.
En cualquiera de sus formatos, el C 63 S E Performance es capaz de acelerar hasta 100 km/h desde parado en 3,4 segundos y lograr 280 km/h de velocidad máxima a pesar de declarar casi 2.100 kg en vacío. Siendo un PHEV, su pila es relativamente pequeña, pues sólo cuenta con 6 kWh de capacidad, lo que en teoría le permite recorrer 13 kilómetros sin emisiones directas. Más allá de su modo de conducción 100% eléctrico, parece que Mercedes se ha tomado en serio la “ecología” de este coche equipándolo con un motor sobrealimentado de gasolina con cuatro cilindros y dos litros que, por sí solo, entrega 476 CV.
Siendo uno de los automóviles con etiqueta ECO más rápidos del mercado, no renuncia a nada de lo que cabría esperar en un vehículo de lujo: tracción integral, dirección en las cuatro ruedas, transmisión automática, turbocompresor eléctrico, multitud de detalles exclusivos, calidades de primer nivel, así como lo último en multimedia y ayudas a la conducción. ¿Sabías que asientos y frenos pueden ser similares a los que se usan en el mundo de la competición?