Las son un hecho habitual dentro de nuestro parque automovilístico, máxime si tenemos en cuenta que . Millones y millones de conductores se enfrentan, todos los años, a este examen técnico
que certifica que nuestro vehículo es apto y seguro para circular. En España, el sistema de inspecciones técnicas, de las ITV, está liberalizado, de forma que cada comunidad autónoma fija el precio de sus inspecciones,
las cuales se llevan a cabo mediante empresas contratadas, especializadas en este tipo de exámenes. La parte negativa de esto es la gran diferencia de precio entre comunidades autónomas, que
puede llegar a superar el 100%. Si nos fijamos en las inspecciones para
turismos equipados con motor de gasolina catalizador, las cinco comunidades más caras son
Castilla y León, con 41.10€,
Andalucía, con un precio de 43.24€,
Valencia, con un coste de 44.19€,
País Vasco, con 46.69€ y, como región más cara de España,
Cantabria, con 47.01€ por inspección. En el otro extremo,
si atendemos a los precios más reducidos, las comunidades que marcan el paso son
Extremadura, que divide las estaciones entre las de gestión privada, con un precio de 35.90€, y de gestión pública (30.95€). Destacan también
La Rioja, con 35.15€,
Baleares (34.46€) y
Navarra, con un precio por inspección de 33.3€.
Si atendemos a las i
nspecciones de vehículos diésel posteriores al año 1980, las diferencias de precio son aún mayores, llegando al 102%. Las más caras son:
Baleares (50.36€),
Cantabria (52.70€),
Murcia (53.70€),
Valencia (55.54€) y
Madrid, con un precio por inspección de 56.50€, siendo la comunidad más cara de toda España. Las comunidades donde realizar la inspección a un vehículo diésel resulta más económico son
Canarias (44.16€),
Asturias (37.90€),
Extremadura (gestión privada: 35.90€),
Navarra (33.30€) y, por último,
Extremadura en las estaciones de gestión pública, con un precio de 30.35€. #TePuedeInteresar
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