El brazo deportivo de Peugeot se centrará en deportivos de producción
Después de finalizar sus proyectos oficiales en el Rally Dakar y en el Mundial de RallyCross, Peugeot Sport dejará la competición y trabajará en el desarrollo de nuevos superdeportivos electrificados.
El pasado mes de octubre, Peugeot Sport confirmaba su decisión de abandonar el Mundial de RallyCross a finales de esta misma temporada. El fabricante del león era una de las marcas que habían expresado su interés en la llegada de una era eléctrica al campeonato a partir de 2020, sin embargo, la decisión de retrasar esta opción un año más y la falta de certezas de que finalmente se lleve a cabo terminó por precipitar una decisión que también ha estado ligada a la producción.
La estructura, que había estado compitiendo junto a Hansen Motorsport desde 2014, primero en el Campeonato de Europa y a partir de 2015 con la creación del Mundial de RallyCross, ha estado lejos de conseguir los resultados que se esperaban, únicamente sumando el título de Campeones Intercontinentales en esa primera campaña.
Cinco temporadas, nueve victorias (dos de Loeb, cinco de Timmy Hansen y dos de Davy Jeanney) que han venido acompañadas de periodos de sequía en los que se han visto ampliamente superados por el equipo EKS RX y posteriormente por el PSRX en su asociación con Volkswagen Motorsport y con la filial sueca de la marca.
El año 2018 iba a ser el primero con la implicación completa de Peugeot como equipo oficial, algo que no ha arrojado las satisfacciones que se esperaban a pesar de ser los únicos, junto a Sébastien Loeb, que han conseguido evitar el pleno absoluto de Johan Kristoffersson al volante de su Volkswagen Polo R Supercar. A pesar de ello la confianza puesta con la llegada del nuevo Peugeot 208 de producción y su versión WRX permitía a la estructura esperar el 2019 con confianza y la esperanza de poder batallar por ambos títulos.
Sería el propio Jean-Philippe Imparato, máximo responsable de la firma de Sochaux, el que apuntaba a que la decisión de cerrar el proyecto deportivo de Peugeot Sport en el World RXno se debía a razones deportivas. Apenas 10 meses después de poner fin a la exitosa etapa del equipo en el Rally Dakar, competición en la que consiguieron tres triunfos de forma consecutiva con su novedoso buggy.
El anuncio venía precedido de la confirmación por parte de las instituciones europeas el pasado 3 de octubre de reforzar la regulación en el viejo continente que planea una reducción del 40% en las emisiones de CO2 en 2030 sobre la base de los 95 gramos ya fijados para 2020.
Los nuevos umbrales impuestos por la Unión Europea llevaban a la firma gala a adelantar su ofensiva eléctrica, algo que no era compatible con la incertidumbre generada en los últimos meses por el E-WRX. Ahora Peugeot Sport se ha quedado sin programa deportivo internacional, una seña de identidad que ha acompañado hasta ahora a las marcas del Grupo PSA, con representación en la Fórmula E a través de DS Automobiles y en el Mundial de Rallies con Citroën Racing.
La propia Peugeot ha confirmado que su departamento de competición pasa a ocuparse de la creación de una nueva y revolucionaria gama de vehículos superdeportivos electrificados con altas prestaciones y “bajas emisiones”. Hasta ahora, la estructura de Bruno Famin ya había trabajado en la puesta a punto de vehículos como los Peugeot 308 GTi o el Peugeot 208 GTi.