UNA DE LAS ESTAFAS RECURRENTES DEL VERANO
Las estafas al volante pueden ocurrir, y de hecho ocurren. Una de las más recurrentes es la estafa del retrovisor, que puede terminar por darnos un buen disgusto si no sabemos cómo reaccionar a tiempo.
Las estafas al volante no son algo nuevo, pero es cierto que cada cierto tiempo se repiten de manera cíclica. En las últimas semanas, según los Mossos d'Esquadra, se está observando un aumento de la conocida como la "estafa del retrovisor". Aunque este engaño no es nuevo, habiendo sido reportado por primera vez hace ya años, su incidencia ha vuelto a aumentar y afecta cada vez a más conductores, en especial durante esta época en la que viajamos con mayor asiduidad.
La policía autonómica catalana ha emitido una advertencia a través de Twitter, brindando valiosos consejos para evitar caer en esta trampa. Los estafadores emplean una estrategia cuidadosamente planificada, centrándose principalmente en conductores de edad avanzada. ¿Cómo actúan los malhechores para conseguir lo que quieren?
El modus operandi de esta estafa implica que los estafadores conduzcan normalmente por la carretera hasta encontrar a una víctima adecuada. Luego, chocan deliberadamente contra el vehículo de la víctima, tratando de dañar el retrovisor para hacerlo parecer un mero accidente fortuito. Una vez que la víctima detiene su coche, los estafadores comienzan su "operación engaño". Hacen creer al conductor que es culpable del accidente y le instan a asumir la responsabilidad de los daños en su retrovisor. A continuación, sugieren resolver el asunto sin involucrar a las compañías de seguros mediante el pago en efectivo.
Utilizando tácticas persuasivas, los estafadores convencen al conductor de que es más conveniente ir a un cajero automático para obtener dinero en efectivo y solucionar rápidamente los supuestos daños del retrovisor. Argumentan que esta opción evitará complicaciones y penalizaciones por parte de las aseguradoras. Una vez que la víctima accede a ir al cajero, los estafadores no solo logran obtener el dinero en efectivo, sino que también observan disimuladamente el código PIN que la víctima utiliza para acceder a su cuenta antes de realizar la transacción. Con esta información, proceden a robar la cartera de la víctima y, finalmente, a vaciar su cuenta bancaria.
Para evitar convertirse en una víctima de esta estafa, se recomienda a los conductores mantener la calma y no sucumbir ante la presión de los estafadores. En caso de sospecha, es fundamental ponerse en contacto inmediato con las autoridades y, sobre todo, evitar revelar información personal o financiera a extraños.