Noruega es, actualmente, uno de los paraísos de los coches eléctricos. Si viajáis hasta este país de la Europa septentrional, podréis comprobar como un alto porcentaje de los vehículos que circulan por las carreteras son eléctricos, o la gran cantidad de estaciones de recarga que posee; especialmente de Tesla. De hecho,
la marca encontró en Noruega uno de sus mercados favoritos y, en palabra de Elon Musk, fundador de la marca, "¡Qué país tan maravilloso! ¡Ustedes son lo máximo!". Algo tendrá que ver que
para 2025, el gobierno noruego este barajando la posibilidad de Para los noruegos, conducir un vehículo eléctrico supone un gran placer y una excelente contribución al medio ambiente. Sin embargo,
también hay motivos económicos por los que estos vehículos son tan populares dentro de sus fronteras:
cero impuestos de compra, muy bajas tasas de rodamiento, cero peajes, transporte gratis en ferries, aparcamiento gratuito en estacionamientos municipales y permiso para circular en los carriles de buses. Además, para los vehículos contaminantes, el gobierno tiene sendas medidas impositivas de modo que, el que contamina, paga más. Aunque también hay ciertos aspectos negativos. Por ejemplo,
la duración de la batería es uno de los principales problemas para los conductores noruegos, ya que, debido a las condiciones gélidas y de poca luz, se necesita un alto consumo y esto debilita la autonomía del coche. Además,
el 30% del mercado de coches eléctricos del país se concentra en Oslo -unos 14.000 vehículos-, mientras que en el norte del país, el furor por estos coches todavía es de un grado bastante menor. En Centímetros Cúbicos: , , , , ,