El objetivo es que haya 0 emisiones tóxicas
Desde el Gobierno han aclarado que el diésel no tiene un día concreto a partir del cual se prohibirá, pero sí que se diseñarán "escenarios orientativos de cero emisiones" para conseguir reducir la contaminación. No se trata solo de los tipos de motores que se usen, sino de que los fabricantes se conciencien completamente.
El 11 de julio, la Ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera expresó ante los medios que "el diésel tiene los días contados". Esta afirmación, muy criticada por la patronal y por los sindicatos del sector del motor, se ha visto remendada por las declaraciones que se han recogido durante una entrevista realizada a la política al explicar que el gobierno no tiene intención de prohibir en un momento determinado el diésel. El objetivo es que, sea el motor que sea, no existan emisiones tóxicas.
A su vez se ha hablado sobre los fabricantes de automóviles, que son quienes se deben adaptar a estas metas sobre las emisiones, según Ribera, ya que esto "incentiva la innovación y adecuación de la industria". También ha apuntado que es "bastante obvio" que para 2050 la movilidad deberá ser 0 emisiones.
"Desde 2012 los datos de Anfac (la patronal de los fabricantes de automóviles) muestran cómo han ido cayendo las ventas del diésel, vamos a un modelo de movilidad diferente, donde el gran éxito del motor de combustión se va viendo desplazado por otras alternativas; la tarea de los gobiernos es acompañar ese proceso" ha asegurado.
Del mismo modo, la Ministra ha alertado sobre la influencia del calentamiento global sobre los movimientos migratorios y cree que la Unión Europea debe dejar de esconderse ante tal situación. Ribera también especificó que 70.000 u 80.000 millones de euros las inversiones requeridas en España hasta 2030 irán destinadas a la transformación del modelo energético hacia la descarbonización.