LEY DE TRÁFICO
Pere Navarro, director general de la DGT, aclaró las dudas en torno a uno de los principales cambios que han entrado en vigor
Para algunos conductores parece lógico pensar que si circulan con el móvil apagado, la Dirección General de Tráfico no debería tener motivos para sancionarles. Así sería si el dispositivo está colocado en su soporte, en la consola inferior, en un hueco portaobjetos o en una mochila, bolso… y no lo tocamos. Pero ¿qué ocurre si conducimos sujetando un teléfono apagado? ¿Nos pueden sancionar por ello?
Cuando entró en vigor la reformada Ley de Tráfico (21 de marzo), Pere Navarro participó en un encuentro digital con los conductores y aprovechó para solucionar algunas dudas surgidas en torno a la nueva norma. Uno de ellos quiso saber la diferencia entre llevar en la mano un objeto como una botella de agua, un pañuelo o un cigarro o un teléfono apagado y, por lo tanto, no usado por el conductor.
No es excusa
El director general de la DGT aseguró que “no son situaciones equiparables” y que llevar en la mano un móvil apagado “no tiene ningún sentido y los agentes de la ATGC (Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil) no pueden ni deben dedicarse a comprobar si el móvil está apagado o no”. De sus palabras se desprende, por lo tanto, que apagar el teléfono no servirá para librarse de la correspondiente sanción: si lo llevamos en la mano habrá multa.
Como ya os hemos explicado anteriormente, este castigo ha sido endurecido con el objetivo de erradicar las distracciones derivadas del uso del móvil al volante. Tanto esta acción como el mero hecho de sujetar un dispositivo de este tipo con la mano es una infracción grave que está penada con la pérdida de seis puntos (en lugar de los tres anteriores) y 200 euros (la cuantía no ha cambiado).
Cómo manipular el móvil en el coche
La Dirección General de Tráfico insiste en que sólo hay una forma legal de manipular un teléfono cuando desempeñamos el papel de conductor: consiste en parar la marcha e inmovilizar el vehículo en un lugar adecuado. Sólo así podremos cambiar la ruta en el GPS, modificar el destino o responder a un mensaje.
La Ley de Tráfico ha aclarado los supuestos que pueden generar dudas en los conductores. Manipular un móvil que está ubicado en un soporte (que, por cierto, tiene que estar homologado) también está prohibido: igual que usar el teléfono cuando estamos parados en un semáforo en rojo. La norma considera que está acción está englobada en el ejercicio de la conducción porque, en esas circunstancias, nuestro coche sigue formando parte del tráfico rodado.