UNA NORMATIVA QUE YA ES EFECTIVA
La normativa que actualiza y regula el funcionamiento y el uso de los patinetes eléctricos ya es una realidad. Y es que desde el pasado 22 de enero, se han introducido cambios muy importantes que todos los usuarios deberían tener claro...
En España, los patinetes eléctricos han experimentado un notable crecimiento en popularidad y utilización en los últimos años, convirtiéndose en una opción de movilidad urbana cada vez más usada. Estos vehículos eléctricos de dos ruedas ofrecen una solución ágil y sostenible para el desplazamiento en entornos urbanos, especialmente en ciudades donde la congestión del tráfico y las restricciones a la circulación de los vehículos a motor pesan más.
El auge de los patinetes eléctricos en España ha provocado que las autoridades busquen regular en cierta medida tanto el uso como las posibilidades técnicas de los patinetes, con normativas que abordan aspectos como la velocidad máxima permitida, la utilización de cascos, y las áreas designadas para su circulación. Este marco normativo busca equilibrar la utilización de estos vehículos y la libertad de circulación de sus usuarios con la seguridad peatonal y la armonía en el uso compartido del espacio público.
El pasado 22 de enero, hace apenas una semana, entró en funcionamiento una nueva norma que muchos usuarios puede que aún desconozcan y que, sin duda, merece la pena tener claro. Y es que desde esta fecha sólo está permitida la comercialización de VMP que hayan sido certificados y que cumplan con todos los requisitos recogidos en el Manual de características de los VMP publicado por la Dirección General de Tráfico el 22 de enero de 2022.
Lo cierto es que parece una pregunta algo "tonta", pero nada más lejos de la realidad: sí, hay muchos patinetes que desde ya tienen fecha de caducidad. Esa fecha es, concretamente, el próximo -y aún lejano- 22 de enero de 2027. Y es que a partir de esa fecha todos los patinetes que circulen (ya no venderse, sino también circular) deberán contar con la mencionada certificación que, en la vida real, podrá ser comprobada por las autoridades gracias a una placa identificativa que debe ser visible, debe estar anclada al chasis del patinete y debe mostrar cierta información como un número de serie, su fabricante o el modelo concreto.
Esto significa que a día de hoy hay cientos de miles de patinetes eléctricos circulando por nuestro país que dentro de menos de tres años tendrán que dejar de hacerlo, ya que si bien desde el pasado 22 de enero ya sólo se venden patinetes que cuentan con la mencionada certificación, los que se han vendido hasta esa fecha cuentan con un permiso especial de 3 años que les permite seguir circulando dentro de la legalidad.