Los detectores de velocidad de actualizan, con mensajes o 'emoticonos', para concienciar a los conductores
Convencer a los conductores de la importancia de respetar los límites de la velocidad es el objetivo principal de los radares pedagógicos que ya se están probando, también en nuestro país. Pictogramas y mensajes persuasivos que buscan informar, no sancionar.
El uso de radares pedagógicos es una práctica cada vez más extendida en nuestras ciudades y municipios. Los ayuntamientos, como el de Vinaròs, ya están probando en los núcleos urbanos este tipo de radares para concienciar a la ciudadanía que hay que respetar las normas viales y, sobre todo, no sobrepasar los límites de velocidad permitidos.
Dichos radares tienen una finalidad informativa y no sancionadora. Son idóneos para realizar campañas de prevención antes de las campañas de sanción. Sensibilizan e incitan a reducir la velocidad gracias a un doble mensaje educativo reforzado.
Hay algunos radares preventivos y educativos, como el Métis 3000, que disponen de una pantalla donde se pueden incorporar pictogramas junto con la velocidad de modo alternativo o mensajes como 'Reducir velocidad', 'Atención zona escolar' o, incluso, pueden aparecer mensajes complementarios con los puntos que el conductor perdería si no modera su velocidad: '-2 puntos'.
Estos radares permiten, también, la medición y estudio del comportamiento de los usuarios de la vía. Son capaces de registrar hasta 400.000 capturas en los dos sentidos de circulación, proporcionando 5 gráficas automatizadas y precisas para la toma de decisiones técnicas en las administraciones públicas.