¿Conoces esta regla básica para conducir?
La regla RSM resulta fundamental a la hora de circular con seguridad, pero no todos los conductores parecen conocerla
Cuando se trata de circular con seguridad, los conductores somos al final los responsables de que todo vaya como debe, minimizando los riesgos inherentes a la circulación por carretera. Una de las normas básicas es la del respeto por el resto de usuarios de la carretera: con respeto y cuidado, es mucho más sencillo reducir los riesgos de la circulación.
Una de las maniobras más peligrosas es la de la marcha atrás: circular marcha atrás implica una atención total por parte del conductor, ya que no lo está haciendo en el sentido natural de la marcha, llevándolo a cabo con una visibilidad y un control mucho más reducidos de lo normal. Por eso, la normativa nos recuerda que debemos circular marcha atrás únicamente cuando sea estrictamente necesario, y siempre a la mínima velocidad posible.
Para circular con la mayor seguridad marcha atrás la DGT nos recuerda la existencia de la “regla RSM”, una regla mnemotécnica que nos permitirá, rápidamente, recordar las tres máximas de la circulación marcha atrás. Pero, ¿qué significan las tres iniciales de la regla RSM?
R: Retrovisor
Los espejos retrovisores de nuestro coche son nuestros mejores aliados para circular con seguridad marcha atrás. Antes de iniciar la marcha atrás es más que recomendable comprobar la visión que obtenemos por todos los retrovisores, cerciorándonos en la medida de lo posible de que no estamos cerca de un obstáculo que pueda suponer un problema en nuestra maniobra.
S: Señalizar
La señalización es básica: ningún conductor sabe lo que va a hacer el coche que lleva delante si su conductor no se decide a señalizar la maniobra, de manera que siempre que vayamos a circular marcha atrás deberemos accionar los intermitentes. Además, conviene asegurarse de que las luces de marcha atrás funcionan correctamente.
M: Maniobra
Como habrás podido imaginar, la última parte del proceso es maniobrar ya de manera efectiva. Tras las comprobaciones anteriores, la maniobra será mucho más segura, aunque eso no es excusa para llevar a cabo la maniobra de cualquier manera. Siempre que circulemos marcha atrás deberemos hacerlo con cuidado, sin movimientos bruscos que puedan desembocar en un accidente o en una situación de peligro tanto para nosotros como para cualquier otra persona.