HAY UN ORDEN DE PRIORIDAD
Cuando son iguales, el RGC explica que hay que hacer caso a la prioritaria o a la más restrictiva… pero ¿qué pasa cuando las señales son distintas?
En la autoescuela nos enseñan las diferentes señales de tráfico y nos ayudan a entenderlas explicándonos el significado de cada una de ellas, pero con el paso del tiempo esos conocimientos pueden flaquear… sobre todo cuándo nos encontramos con dos que son contradictorias: ¿a cuál hay que hacer caso?
La primera respuesta la encontramos en el Reglamento General de Circulación: “En el caso de que las prescripciones indicadas por diferentes señales parezcan estar en contradicción entre sí prevalecerá la prioritaria o la más restrictiva si se trata de señales del mismo tipo”. ¿Y si son diferentes? Es ahí donde la Dirección General de Tráfico (DGT) recuerda cuál es el orden entre las señales de tráfico.
Agentes de tráfico
Sus órdenes prevalecen por encima de todas las demás. Las autoridades policiales pueden indicarnos estas señales levantando el brazo verticalmente, dando órdenes con un silbato, con una luz, con una bandera… Ignorar o incumplir estos mandatos es una infracción grave que implica multas de hasta 200 euros y la retirada de cuatro puntos en el carnet de conducir.
Semáforos
En un nivel inferior se encuentran los semáforos, encargados de regular la circulación de conductores y peatones mediante luces fijas o intermitentes. Hay que cumplir su mandato siempre ya que si no lo hacemos, la multa es la misma que en el caso anterior: 200 euros y cuatro puntos menos.
Señales verticales
Son las encargadas de advertirnos, informarnos y establecer lo que se puede y no se puede hacer cuando estamos circulando. Están ubicadas en los laterales de la calle o la vía, donde nos encontraremos cuatro tipos en función de su forma:
Señales horizontales
En el orden de prioridad, las últimas son las marcas viales que están pintadas sobre el asfalto. Su misión pasa por guiar al conductor y darle la información necesaria para circular con seguridad.