MEJOR NO HACER TRAMPAS
La Inspección Técnica de Vehículos es un trámite obligatorio que deben pasar los vehículos cada cierto tiempo en función de su antigüedad. Una gestión a la que muchos conductores han acudido más relajados de lo normal.
Una de las gestiones más pesadas para todo conductor es pasar la ITV. Esta Inspección Técnica de Vehículos tiene como objetivo asegurar que los automóviles y motocicletas en circulación cumplan con unas condiciones de seguridad mínimas exigidas para reducir el riesgo de accidentes por motivos técnicos y contribuir a proteger el medio ambiente a través de la reducción de las emisiones de los gases de escape.
Pese a ser un mero trámite, este es obligatorio para todos los propietarios de los vehículos cuando un turismo cumple cuatro años desde su matriculación. A partir de estos cuatro años, tendrás la obligación de pasar la revisión bienalmente hasta que cumpla la década. Pasados estos dos lustros, tocará aumentar la periodicidad y pasar la ITV cada año.
Pasar por este trámite puede generar cierta incertidumbre, puesto que, como hemos mencionado, para poder circular se debe superar esta inspección de manera satisfactoria. Sin embargo, en los últimos años se ha dado a conocer un peculiar caso en el que los clientes de un centro de ITV fueran muy relajados, sin presión alguna sobre si su turismo iba a pasar o no esta prueba.
El motivo por el que las personas que acudían a las instalaciones de una ITV concreta no era otro que por su truco del coche comodín. Esta argucia consistía en que el centro realizaba las pruebas a un vehículo que, 100% seguro, iba a superar cada una de las pruebas, consiguiendo así resultados positivos.
Este descubrimiento ha formado parte de la operación conocida como Frenómetros, iniciada el pasado año cuando un grupo de guardias civiles del Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico (GIAT), perteneciente al Sector de Tráfico, comenzaron a tener ciertas sospechas de que en esas instalaciones quizá se podían estar dando prácticas fraudulentas.
Las primeras pruebas fueron puesta a disposición de la Dirección General de Energía, Actividad Industrial y Minería de la Comunidad Autónoma afectada. Con el paso de las semanas, lo que antes eran simples sospechas se convirtió en una realidad, obteniéndose mucha más información sobre todas las vergüenzas de esta sorprendente trama y poco enorgullecedora para los operarios que cada día cumplen con su trabajo.
La ITV que ha organizado esta fullería o truco en cuestión se sitúa en Murcia, donde se inició el operativo, una 'broma' que les está saliendo cara al gobierno regional de López Miras, que está recibiendo una gran multitud de críticas tras dar a conocer la noticia.