FÁCIL, ECONÓMICO Y MUY EFECTIVO
En verano, conseguir que el coche huela bien es una gran noticia, y si además podemos lograrlo sin gastar dinero... mejor. Te contamos cómo.
La época estival es, sin duda alguna, una de las más intensas en cuanto a desplazamientos por carretera. Es lógico, por otro lado, que cuando la mayoría de familias disfrutan de sus vacaciones se lancen también a la carretera en busca de sus añoradas y merecidas vacaciones. Esta situación supone, para muchos conductores y viajeros, pasar muchas horas dentro de su coche. De ahí el hecho de que contar con un habitáculo agradable sea aún más importante.
La sensación de limpieza del habitáculo de nuestro vehículo está directamente relacionada con la comodidad a bordo. Viajar dentro de un coche en el que todo está ordenado, sin aparente suciedad, hace que viajemos más cómodos y, en definitiva, más a gusto. Uno de los factores que influye directamente en la sensación de limpieza de nuestro coche es, de hecho, el olor. No es ninguna novedad: los fabricantes de automóviles destinan una importante cantidad de recursos simplemente para que huela a nuevo
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Sin embargo, con el paso del tiempo y el uso el agradable olor que desprende un habitáculo de un coche nuevo termina por desaparecer, aunque podemos hacer que nuestro coche huela siempre a limpio, incluso cuando no lo acabamos de limpiar, de manera simple, rápida y barata con este truco.
Sólo necesitas dos cosas que todos tenemos en casa: agua y unas gotas de suavizante. El suavizante que usamos para la ropa, ese que perfuma nuestra colada, es ideal para impregnar un olor agradable en las superficies textiles de nuestro vehículo. Te recomendamos que uses un spray pulverizador (puede servirte cualquier bote vacío) en el que, tras llenarlo de agua, añadimos unas gotas de suavizante. Apenas unas gotas son suficientes para que el agua se "transforme" en perfume, ideal para nuestro coche.
Tras ello, es tan fácil como pulverizarlo en superficies textiles del coche, como la moqueta del maletero, las alfombrillas o la moqueta del suelo del habitáculo. No te recomendamos que lo apliques en los asientos, tampoco en el techo, ya que éste último puede humedecerse en exceso, haciendo que la tela se despegue.
La solución perfumada que hemos "creado" nos permitirá contar siempre con un aroma agradable en el coche, y en caso de que queramos mayor intensidad, sólo tenemos que dejar el spray guardado en el maletero y, cada vez que nos apetezca, volver a pulverizar las moquetas para que éstas vuelvan a desprender el agradable olor del suavizante. Además, como éste se ha diluido en el agua, no dejará ningún tipo de rastro o mancha.