PRESTA ATENCIÓN A ESTE DETALLE
A menudo, los vendedores pueden intentar ocultar estos problemas para vender el coche a un precio más alto.
Cuando se busca comprar un coche de segunda mano, es crucial asegurarse de que el vehículo no haya sufrido daños graves en el pasado, como un accidente o una inundación. A menudo, los vendedores pueden intentar ocultar estos problemas para vender el coche a un precio más alto. Sin embargo, hay algunos trucos sencillos que pueden ayudarte a detectar estos engaños, y todos están en el cinturón de seguridad.
Lo primero que podemos hacer es tirar del cinturón completamente, hasta llegar al tope. Una vez hecho esto debemos revisar la cinta, y buscar marcas marca de agua, barro o moho. Si las encontramos puede indicar que el coche ha sufrido una inundación.
Por otro lado también deberemos comprobar el correcto funcionamiento del mecanismo. Saca la cinta del cinturón hasta el tope y suéltala. Si el cinturón no se retrae de manera fluida o se atasca, esto podría ser una señal de que el mecanismo ha sido sometido a un estrés significativo, posiblemente un accidente.
Por último, debes inspeccionar si el cinturón parece haber sido sustituido. En la parte inferior del cinturón suele haber una etiqueta con el nombre del fabricante, el número y la fecha de fabricación. Un cinturón nuevo en un coche antiguo podría ser una señal de que el original fue reemplazado tras un accidente.
Estos simples pasos pueden ayudarte a evitar sorpresas desagradables al comprar un coche de segunda mano.