El "Dieselgate" le va a costar 1.000 millones de euros a Volkswagen en Alemania
Volkswagen llega a un acuerdo con las autoridades alemanas y acepta una multa por el "Dieselgate" de 1.000 millones de euros.
Si de algo se ha hablado en el mundo del motor en los últimos años ha sido del escándalo de las emisiones contaminantes del Grupo Volkswagen, un escándalo que ha agitado las bases de la industria automovilística a nivel mundial. Ahora, tres años después de su descubrimiento, el "Dieselgate" sigue dando coletazos en muchos puntos de la geografía mundial.
La percepción del diésel por parte del cliente ha cambiado sustancialmente desde que este asunto viese la luz, de forma que, a día de hoy, el gasóleo es, posiblemente, el combustible menos aceptado, siendo además el que más retrocede en cifras de ventas en perjuicio de otras propuestas como los motores de gasolina ultra-eficientes o los propulsores híbridos.
Hoy conocemos que el Grupo Volkswagen ha llegado a un acuerdo con las autoridades alemanas, aceptando la imposición de una multimillonaria sanción que alcanza los 1.000 millones de euros, sanción que se divide en dos apartados diferentes. El primero de ellos hace referencia a la multa económica como tal, valorada en 5 millones de euros.
Además, el gigante automovilístico tendrá que devolver 995 millones de euros en concepto de beneficios económicos obtenidos de forma ilícita. Así lo afirma el propio Grupo Volkswagen: "De acuerdo con los resultados obtenidos por el fiscal de Braunschweig, hubo causas concurrentes en un total de 10,7 millones de vehículos con los motores diesel de los tipos EA 288 (Generación 3), en Estados Unidos y Canadá, y EA 189, en todo el mundo, siendo anunciados, vendidos a los clientes y colocados en el mercado con una función de software inadmisible en el período comprendido entre mediados de 2007 y 2015"
Con la aceptación de esta sanción por parte del Grupo Volkswagen, así como la no presentación de cualquier tipo de recurso, se cierran todos los procedimientos legales abiertos en Alemania contra el fabricante de automóviles, un hecho que, según la propia compañía, tendrá un efecto positivo sobre el resto de procedimientos que el grupo tiene abiertos en su contra en Europa.