En los últimos años
el ha perdido parte del protagonismo del que siempre había gozado en los principales mercados europeos. Aunque sus ventas son elevadas, rivales como los Opel Astra, Volkswagen Golf y Peugeot 308 han conseguido quitarle muchas ventas. La próxima generación ya está casi lista para su debut.
Será entre enero y febrero cuando la firma lo presente en un evento especial y, ya en verano, llegará a los concesionarios de los mercados europeos más importantes. Será un modelo global aunque muy adaptado a los gustos del viejo continente.
El nuevo Focus seguirá las directrices vistas en el último Fiesta, es decir,
subirá un escalón en calidad de terminación y equipamiento, dejando fuera las versiones básicas. Así el acabado Ambiente desaparecerá y serán los Trend, ya bien equipados, los más asequibles. Ford no cree que
la nueva generación del Focus pueda venderse en los mismos niveles que el actual dado que será algo más caro. Esto no será algo malo dado que cada unidad vendida será mucho más rentable. También como ha ocurrido en el Fiesta, el nuevo Focus tendrá versiones específicas adaptadas a un público más especial; por un lado llegará
los Active de aspecto campero, y por otro
los refinados Vignale con una cuidada presentación y servicios específicos.