En las próximas semanas
Volkswagen comenzará la comercialización en algunos mercados europeos del Transporter Sportline, una opción poco habitual en el segmento de los comerciales que destaca por su imagen más deportiva y una puesta a punto específica. Tan sólo hace falta un rápido vistazo a su carrocería para notar los cambios efectuados. Lo más llamativo es
el paragolpes delantero específico y de formas más agresivas, si bien las llantas de aleación de 18 pulgadas, el alerón trasero y la suspensión rebajada también ponen su granito de arena.
Otros elementos que incluyen los Sportline son
los cristales sobretintados, las carcasas de los retrovisores en fibra de carbono, ópticas delanteras con tecnología LED y la cola de escape cromada. Ya en el interior
lo más llamativo es el color elegido para el tapizado en piel, combinando el rojo y el negro. También se incluyen alfombrillas específicas, sistema de navegación integrado con pantalla de 6,5 pulgadas, bluetooth, lector de tarjetas SD y climatización automática.
Volkswagen ha comunicado que en un inicio sólo podrán comprarse con el motor
2.0 TDI de 180 CV en combinación con el cambio manual de seis velocidades o bien con la caja de doble embrague DSG. Antes de que termine el año también será posible adquirirlo con el
2.0 TDI Bi-Turbo de 204 CV asociado a las dos cajas mencionadas.
Lo que no tenemos claro es si llegará al mercado español en algún momento. Este tipo de variantes no suelen tener demasiada aceptación en nuestro país, especialmente si el precio es bastante elevado.