potencia conjunta a demanda es de 184 caballos
Uno de los protagonistas de la semana en Centímetros Cúbicos ha sido el Honda CR-V híbrido que ha probado Alberto Montoya. La capacidad tecnológica de Honda abarca muchos y diversos campos, pero tenían una asignatura pendiente: los modelos híbridos, y este SUV saca nota. Con él, entran de lleno en el mundo SUV con una mecánica que el mercado demanda cada vez más.
Esta semana, Alberto Montoya se ha puesto al volante del Honda CR-V Hybrid, que se convierte en el primer SUV híbrido que la marca japonesa comercializa en Europa. El CR-V es uno de los superventas de Honda y, aprovechando el filón de los SUV y los coches híbridos, ha combinado ambos conceptos para hacerte olvidar la opción del diésel.
El Honda CR-V Hybrid 2019 combina dos motores eléctricos (generador e impulsor) y una batería de iones de litio con un motor de gasolina de ciclo Atkinson. Este último es un propulsor i-VTEC, de 2.0 litros y 145 CV. En suma, 184 CV de potencia y un par de 315 Nm gracias a los cuales la unidad híbrida es capaz de un 0-100 km/h en sólo 8,8 segundos en las versiones de tracción delantera (9,2 segundos en el 4x4).
En la mayoría de situaciones de conducción en entornos urbanos, el CR-V Hybrid cambiará automáticamente entre el modo Hybrid Drive y el modo EV Drive para intentar conseguir la máxima eficiencia. El CR-V Hybrid 4x2 homologa un consumo de 5,3 l/100 km y unas emisiones de CO2 de 120 g/km. En la versión 4x4 ambas cifras se incrementan ligeramente, con unas emisiones de CO2 de 126 g/km y un consumo de combustible de 5,5 l/100 km. En cualquier caso se benefician de la etiqueta ECO.
Honda también ha aprovechado para renovar el diseño exterior, al que han intentado conferirle un aspecto más atlético con unos pasos de rueda más anchos, neumáticos y llantas de mayor tamaño (de 18 pulgadas de serie), un voladizo trasero más corto y una distancia entre ejes 30 mm más larga que redunda también en un interior más espacioso.
El frontal, con el característico lenguaje de diseño Honda, incorpora rejillas activas en la parrilla para mejorar la aerodinámica. Por defecto están cerradas, pero su apertura se ajusta dependiendo de las necesidades de refrigeración del motor, el aceite de la transmisión y el aire acondicionado. VER VIDEO.