Casi 400 km de autonomía funcionando con gas según el nuevo ciclo WLTP
El consumo promedio según el ciclo WLTP es de 4,4 kg de GNC cada 100 km en el A5 Sportback 40 g-tron, ofreciendo una autonomía de 393 km con gas, quedando la gasolina (7 litros) como recurso de urgencia para otros 120 km. Cómo híbrido, disfruta del distintivo ECO de la DGT.
Audi remozó la pasada primavera su gama de modelos alimentados con gas natural comprimido (GNC), que en el caso de los Audi A4 Avant g-tron y A5 Sportback g-tron se reduce a su actualización para homologarse según el ciclo WLTP. Una cuestión de ajustes, ya que tanto el motor del Audi A4 Avant 40 g-tron como del A5 Sportback 40 g-tron (nuestra unidad de prueba) sigue siendo el mismo 2.0 TFSI con 170 CV de potencia y un par máximo de 270 Nm, siempre asociado a un cambio automático S tronic.
Una mecánica, que para adaptarse al funcionamiento con gas natural, el motor recibe cambios en los pistones y en las válvulas respecto a un 2.0 TFSI convencional. Estas dos versiones g-tron aceleran de 0 a 100 km/h en 8,4 segundos, y difieren ligeramente en el consumo. El consumo promedio según el ciclo WLTP es de 4,4 kg de GNC cada 100 km en el A5 Sportback g-tron, ofreciendo una autonomía de 393 km con gas, mientras que el A4 Avant g-tron homologa 4,5 kg/100 km, lo que reduce la autonomía a 383 km funcionando con GNC. De hecho, el depósito de gasolina de sólo 7 litros en ambos modelos hace que sean vehículos prácticamente monovalentes.
Por alimentarse de gas natural comprimido, ambos modelos disfrutan del distintivo ECO de la DGT, con las ventajas fiscales y de circulación en algunas ciudades que conlleva. En el lado opuesto, entre las desventajas encontramos unos maleteros cuyas capacidades se reducen notablemente en ambos casos para albergar los depósitos de gas: el maletero del A5 Sportback g-tron se queda en 390 litros (frente a los 480 de las versiones diésel y gasolina).
Aun así, el maletero sigue siendo muy aprovechable y práctico, especialmente gracias a que cuenta con portón, lo que siempre facilita las cosas. Esta versión pesa también 90 kilos más que las dos que pueden comparársele, pero no hemos percibido ningún cambio significativo ni en su comportamiento ni en su respuesta, que no puede calificarse de brillante pero sí de satisfactoria y acorde a la potencia disponible.
El A5 Sportback g-tron está disponible en España con un precio desde 46.840 euros.
Prueba de conducción:
Hasta aquí los datos. Aunque hay quien dice que las prestaciones son inferiores, es difícil notar diferencias. Parece, eso sí, que tras agotar el gas (5,7 kg en conducción real mixta) y entrar en juego la gasolina (recomendamos sólo hacerlo en caso de emergencia, por compromiso ecológico y, también, por gasto -7l/100km.) si parece apreciarse un puntito -muy leve- más de alegría en las reacciones del magnífico 2.0 TFSI del grupo.
El comportamiento, por otra parte, es muy similar a sus hermanos de combustión pura. Adelanta con solvencia, tiene una aceleración razonable por peso y potencia, y el confort es muy similar. Decimos esto, porque al deposito de gasolina se suman el peso de los depósitos de gas. Algo más de peso y volumen adherido.
Este suplemento no ha mermado, insistimos, las prestaciones. Además, como sus hemanos, cuenta con distintos modos de conducción del Audi Drive Select para adaptarlo a nuestras necesidades puntuales de confort o dinamismo. Por lo demás, funciona como un gasolina o diesel de las mismas prestaciones. En este caso, el cambio automático con levas en el volante, le aporta mayor agrado de conducción.
Tres depósitos de gas
Al igual que en los anteriores modelos g-tron, existen dos depósitos de polímero reforzado con fibra de vidrio (PRFV), polímero reforzado con fibra de carbono (PRFC) y poliamida estanca al gas en la capa interior que, al estar construidos con materiales compuestos, resultan muy ligeros. El depósito cilíndrico adicional está fabricado en acero. En total, los tres depósitos permiten alcanzar una capacidad de 17,3 kg de GNC. Se reduce el espacio disponible en el maletero del A5 Sportback g-tron alcanza los 390 litros, frente a los 480 de sus hermanos de combustión pura.
El depósito de gasolina, que ahora tiene una capacidad de 7 litros en los A5 Sportback g-tron, proporciona la reserva necesaria para garantizar la movilidad. La reducción del tamaño del depósito de gasolina hace que los nuevos modelos g-tron sean vehículos casi monovalentes. Aprovechando las dimensiones y ventajas específicas de cada una de las dos tecnologías, la combinación inteligente de los depósitos de fibras compuestas con el depósito adicional de acero consigue un óptimo aprovechamiento del espacio existente para la instalación.
Estrictos requisitos de seguridad
Los dos depósitos realizados en PRFV/PRFC, que almacenan el gas con una presión en funcionamiento de hasta 200 bares, siguen la filosofía de diseño ligero de Audi, con un peso un 66 por ciento inferior con respecto al de los depósitos de acero equivalentes. Su capa interna es una cámara de poliamida hermética al gas. El laminado reforzado con fibra que soporta la carga consiste en una capa intermedia de polímero reforzado con fibra de carbono (PRFC) y una segunda capa de polímero reforzado con fibra de vidrio (PRFV) en la parte exterior.
Esta combinación asegura una resistencia ultra alta. El uso de estos materiales compuestos no solo mejora la estabilidad. Si se aplica fuerza desde el exterior, por ejemplo, en caso de accidente, el color de la capa cambia a un tono blanco, lo que supone un fiel indicador visual de daños. Antes de instalarse en un automóvil, cada tanque se somete a las pruebas necesarias durante el proceso de producción para garantizar que la instalación cumple con todos los requisitos de seguridad.
Las tomas para el repostaje, tanto de gas como de gasolina, se encuentran bajo la misma tapa. Dos indicadores informan al conductor sobre los niveles de capacidad de los respectivos depósitos. El sistema de información al conductor FIS muestra el consumo de combustible en el modo de propulsión utilizado.
En resumen, el A5 Sportback g-tron es el mismo bello cupé de siempre equipado ahora con una tecnología que puede permitirte un ahorro notable (dependerá del uso) y la posibilidad, merced a la etiqueta ECO, de moverte sin restricciones, salvo la relativamente limitada autonomía. Pero si se cuenta con una de las cerca de 100 gasineras con que acabaremos el año en españa, compensa. Ejemplo real: 304 km con 17,71 € (0,949/kg).