SCENIC E-TECH

Al volante del nuevo Renault Scenic: el primer monovolumen compacto se reinventa para ponerse a la moda

Hemos viajado a Málaga para conocer el nuevo Renault Scenic, un modelo pionero que casi 30 años después pasa de ser un monovolumen compacto a convertirse en un SUV de aire coupé.

Si te digo Renault Scenic, estoy segura de que lo primero que viene a tu mente es un monovolumen. Pero no uno cualquiera, porque al igual que otros modelos de la marca francesa como el Renault 5 o el Clio, el Scenic se convirtió rápidamente en un superventas, creando su propio segmento. En la búsqueda del máximo confort y seguridad de las familias, nacía así, hace ya 27 años, el primer monovolumen compacto de la historia. Y tras varias generaciones poniéndose al día para pelear en una categoría cada vez menos demandada, Renault se ha tomado muy enserio la frase de “renovarse o morir”.

Nos hemos puesto cara a cara con la evolución más tecnológica y eficiente del Scenic: la versión E-Tech 100% eléctrica. Renault ha sabido mantener la esencia que siempre ha caracterizado a este monovolumen compacto tanto por su reducido tamaño y su gran habitabilidad, pero adaptado a 2024, con mucha tecnología e innovación. Además de su motor cero emisiones, para que tú también te olvides de las restricciones medioambientales.

Es difícil no centrarse en su diseño, que ahora tiene una estética más SUV. La marca del rombo deja así muy claro que esa es su principal seña de identidad. Lo primero que llama la atención en su prominente frontal es la presencia del nuevo logo y la firma luminosa. Destacando también las luces diurnas en forma de medio rombo, situadas en cada extremo, algo que le da mucha fuerza. Un patrón que sigue en la trasera y que da más presencia a este monovolumen compacto de tan solo 4,47 metros de largo.

Dentro hay mucho espacio. Cinco pasajeros pueden viajar con mucha soltura, incluso los más altos, y puedes guardar todo lo que necesites en tu día a día en sus amplios compartimentos. Aunque lo que es especialmente amplio para el “reducido” tamaño del Scenic, son los 545 litros de maletero, con una trampilla de acceso muy curiosa a través de la que, sin abatir asientos ni quitar la cubierta, puedes colocar objetos largos.

Como buen vehículo familiar, Renault no podía olvidarse del entretenimiento a bordo. A través de una pantalla táctil vertical de 12 pulgadas, tenemos acceso a un sistema multimedia openR link, con Google integrado, y con más de 50 aplicaciones con las que puedes planificar un viaje, escuchar tu música preferida o lograr que los niños se entretengan jugando.

Y es compatible con Android Auto y Apple Carplay. Podrás utilizar apps tan conocidas como Waze o Spotify, tanto por cable como forma inalámbrica. Verás que es muy simple e intuitivo y se puede manejar con la mano, o también con la voz.

Algo que resulta verdaderamente llamativo es su techo de cristal panorámico. Se denomina Solarbay y no es el típico techo de convencional con cortinilla al que estamos acostumbrados. Este se cubre totalmente o por segmentos, en cuatro posiciones: todo opaco, todo transparente, techo delantero transparente y techo trasero opaco y viceversa. Una gran solución para cuando el sol molesta al conductor, pero no a los pasajeros.

En cuanto a su gama mecánica, el nuevo Renault Scenic E-Tech 100% eléctrico lo pone fácil. Solo hay disponible dos opciones de motor y dos de batería. Por un lado, tenemos uno con 170 CV y una batería de 60 kWh, que le da una autonomía de más de 420 km. Mientras que el más potente, el de 220 la batería aumenta hasta los 87 kWh y promete autonomías de más de 600 km.

Esta última es la que hemos tenido oportunidad de probar y anota casi 630 kilómetros. Un modelo con el que tampoco tendrás que temer a las zonas de bajas emisiones y las constantes restricciones medioambientales. Y es que, al ser 100% eléctrico, cuenta con la etiqueta CERO emisiones de la DGT.

Lo más interesante de un eléctrico es su capacidad para recuperar energía, algo que en este Scenic podemos hacer utilizando estas levas de detrás del volante. Tiene cuatro niveles en los que, según accionas y sueltas el pedal del acelerador, el coche utiliza cada vez más el freno motor y gana autonomía.

Sin embargo, este coche no solo es sostenible bajo su piel. También ha recurrido a materiales reciclados para partes de la carrocería, puertas y capó, y para el habitáculo. Ya no se utiliza cuero animal y se recurre a botellas de plástico recicladas para las alfombrillas, o vidrio también reciclado para el techo solar.