Podría ser así en más países
8 de cada 10 coches vendidos en Noruega son eléctricos pero, ¿podría llegar España a reflejar esas ventas?
La senda que ha escogido la industria del automóvil -potenciada por un marco legislativo a favor de ella- ha derivado en un aumento considerable de la existencia de vehículos eléctricos en el mercado. Como ya sabemos, el año 2035 está llamado a ser el punto de inflexión al erradicar a los coches de combustión como ya está ocurriendo en países como Noruega, donde 8 de cada 10 coches eléctricos vendidos son 100% eléctricos pero, ¿sucederá algo similar en España?
Y es que no debemos olvidar que la Unión Europea ha marcado dicho año en el calendario para todos los países miembro sin excepción, entre los que se encuentra España con un claro menor número de ventas en lo que a coches eléctricos se refiere. Pese a que Noruega no pertenece a esta, sí que es a donde miran muchos otros que no tienen una situación semejante.
Sin ir más lejos, el coche más vendido en el país escandinavo ha sido el Tesla Model Y de la mano de un 19,8% de la cuota del mercado total pero, ¿dónde está el truco? Uno de los principales alicientes en Noruega para adquirir un vehículo 100% eléctrico es que estos están completamente exentos de pagar el IVA -un 25% en Noruega- y un impuesto de hasta el 20% equivalente al impuesto de matriculación cuyo tipo varía en función de las emisiones de CO2 del vehículo.
Y es que en 2020 las ventas de coches eléctricos superaron por primera vez a la del resto de vehículos, dejando patente el inequívoco éxito de estos. Mientras que el primer puesto del ranking le corresponde al Tesla Model 3 -marca líder, por cierto-, el segundo lo ocupa el más recién llegado Skoda Enyaq. Sin embargo, el laborista Jonas Gahr Stoere ha decidido regularizar la situación.
En su opinión, que los coches eléctricos dominen el mercado es síntoma irrefutable de que las ayudas a su compra han cumplido con creces. Con esta premisa, Gahr plantea un impuesto al lujo ideado para gravar con un 25% el precio de todo coche eléctrico que exceda las 600.000 coronas noruegas, algo más de 60.000 euros al cambio.
Esta situación podría frenar drásticamente el asentamiento del coche eléctrico, aunque siguen existiendo numerosas opciones que no superan el mínimo estipulado, los cuales siguen estando exentos de pagar cualquier impuesto. Pero, ¿será esta situación viable en España?
Lo cierto es que en nuestro país las ayudas del Gobierno para la adquisición de un coche eléctrico pasan por el Plan MOVES, que a su vez está sujeto a cada comunidad autónoma y al tipo de condición laboral que presente el comprador. No debemos olvidar tampoco que la ayuda será mayor o inferior en función de si entregamos un coche para achatarrar.
Además, debemos tener en cuenta la infraestructura de carga, que en España sigue siendo escasa frente a la que presentan otros países. Sea como fuere, con el año 2035 como punto de no retorno no queda más remedio que emprender una ruta sin fisuras hasta el asentamiento del coche eléctrico.