El fabricante italiano sigue con su hoja de ruta
La compañía además adaptará durante los próximos años su planta de Sant'Agata para cumplir con el compromiso medioambiental
El toro se convierte en eléctrico, o al menos uno de sus modelos. La firma de Sant'Agata Bolognese sigue con su plan de descarbonización, medidas entre las que se encuentra la adaptación de sus instalaciones para que puedan funcionar con biometano. Se estima que se suministrarán para la planta de Lamborghini en torno a cuatro millones de metros cúbicos por año de dicho gas, lo que permitiría una reducción de las emisiones de CO2 que produce la compañía, del actual 37% al 80% que calcula el fabricante, una diferencia en torno a las 11.000 toneladas al año.
Stephan Winkelmann, Presidente y CEO de Automobili Lamborghini, ha declarado: “Lamborghini fue una compañía pionera en la industria del automóvil en cuanto a sostenibilidad, en un momento en el que las grandes empresas todavía no abordaban el problema o solo lo hacían parcialmente. Nuestro compromiso comenzó en 2009 a través de una serie de programas e inversiones, que en 2015 nos llevaron a lograr la certificación “CO2-neutral” en nuestras instalaciones. Y hoy, nuestro camino se está acelerando con el objetivo de pasar de ser una planta de producción neutral en CO2 a una empresa neutral en CO2 a través de un enfoque integral que involucra el producto, la fábrica, la logística y la cadena de suministro".
Sin embargo, lo que sin duda importará más a los aficionados a la firma italiana de deportivos es conocer cuál es el plan de lanzamientos que contempla la misma, integrado dentro de la hoja de ruta conocida como “Direzione Cor Tauri” (toma su nombre de la estrella más brillante de la constelación Tauro), la cual se llevará a cabo durante la actual década y que tendrá precisamente como colofón que habrá un "cuarto" modelo completamente eléctrico para 2030.
Previamente, para el año 2024, se espera que toda la gama de productos de la compañía transalpina este completamente hibridizada, lo que requerirá una fuerte inversión por parte de Lamborghini para adoptar especialmente sus procesos productivos y trenes motrices. Este montante se estima que ascenderá hasta los 1.500 millones de euros en cuatro años, lo que sin lugar a dudas se trata de una de las acciones más importantes y costosas de la historia de la marca fundada por Ferruccio Lamborghini.
El fabricante de deportivos italiano no será la única marca del Grupo Volkswagen que planea un gran cambio de rumbo para los próximos años. Bentley sin ir más lejos ya confirmó hace unos meses que su primer modelo 100% eléctrico llegará de cara a 2025, mientras que para 2026, todos los modelos de su catálogo tendrán una variante electrificada, mientras que de cara a 2030, se espera que los motores de combustión interna pasen a un segundo plano y la firma británica se centre únicamente en modelos alimentados por baterías.