Lexus presenta su primer modelo eléctrico de producción
Lexus da la bienvenida al primer modelo eléctrico de producción de su historia: se llama UX 300e, y está construido sobre la plataforma de su crossover más pequeño, el Lexus UX
El mundo de la movilidad eléctrica cada vez está más presente en nuestro día a día. Hace ya muchas décadas que los fabricantes iniciaron un proceso que poco a poco comienza a cristalizarse en forma de una gama de vehículos eléctricos cada vez más amplia, cada vez más competente y variada. Los japoneses de Toyota y Lexus han sido de los últimos fabricante en aplicar éste tipo de propulsión, pero el primer modelo 100% eléctrico de Lexus ya está aquí.
Desde hace más de dos décadas Toyota ofrece modelos con tecnología híbrida, convirtiéndose en uno de los fabricantes más limpios y avanzados en canto a propulsión ecológica. Sin embargo, parecía que en el terreno de la movilidad 100% eléctrica se habían quedado algo rezagados, un hecho que comienza a corregirse con la llegada del Lexus UX 300e.
Las diferencias a nivel estético son apenas imperceptibles respecto a su hermano con mecánica híbrida, el Lexus UX 250h, un modelo que está cosechando un gran éxito de venta en zonas como Europa. Ahora llega la versión eléctrica, cuya única diferencia a nivel estético es un nuevo color para la carrocería, un cuadro de mandos rediseñado y una palanca de cambios diferente, similar a la del gran coupé de lujo Lexus LC.
Es bajo la carrocería donde encontramos las mayores diferencias: el sistema de propulsión híbrido se ha sustituido por un sistema eléctrico formado por un motor en la parte delantera con 204 CV alimentado por una batería de 53.2 kWh de capacidad bruta, una cifra inferior a la de la mayoría de sus rivales, que le otorga una autonomía NEDC de 400 CV, que raramente superará los 300 kilómetros en un uso normal.
El Lexus UX 300e será capaz de recargarse en seis horas a través de una toma de corriente de 6.6 kW de potencia, pudiendo incluso alcanzar los 50 kW de potencia máxima de carga, lo que le permitirá recargarse completamente en aproximadamente una hora. Se trata de cifras conservadoras, aunque Lexus ha preferido centrar su apuesta en otros factores como las prestaciones o el agrado de conducción, con un aislamiento aún mayor que en el caso de su hermano híbrido.