Opel presenta su versión del cuadriciclo eléctrico francés
El Opel Rocks-e es una grata sorpresa: basado en el reciente Citroën AMI, los chicos de Opel han diseñado su reinterpretación del pequeño modelo francés
La movilidad eléctrica sigue ganando adeptos, siendo la gran ciudad el terreno donde los coches eléctricos brillan por encima del resto. Y es que a las cualidades propias de un coche nuevo como la suavidad y el confort se unen otras inherentes a los coches eléctricos como el silencio de marcha, la ausencia de cualquier tipo de ruido mecánico o la facilidad de conducción, amén de un coste de uso mucho más reducido que el de las alternativas con motor de combustión.
El coche eléctrico cada vez es más popular, pero también es cierto que las grandes ciudades están faltas de espacio, faltas de lugares por donde poder circular con unos coches de cada vez mayores dimensiones. Es ahí donde entran en juego alternativas y propuestas como el Citroën AMI y, ahora, su hermano "casi-gemelo" recién presentado, el Opel Rocks-e.
El Opel Rocks-e es un cuadriciclo eléctrico basado en el Citroën AMI
De manera casi idéntica al Citroën AMI, el Opel Rocks-e es un cuadriciclo de dos puertas, con carrocería construida en materiales plásticos, que se destina básicamente al uso urbano. Bajo su condición de cuadriciclo, además, permite que los jóvenes a partir de 16 años puedan utilizarlos siempre que cuenten con una licencia de ciclomotor.
Estéticamente el Opel Rocks-e se ha presentado con una decoración ciertamente más "cañera" y atrevida que la del Citroën AMI, con colores más llamativos y nuevos tapacubos para sus pequeñas ruedas. Los paragolpes cuentan también con motivos decorativos diferentes, mientras que en el interior el color amarillo flúor es el protagonista de casi todas las superficies de recubrimiento aunque, en la práctica, las modificaciones frente a su hermano francés se limitan al logo del volante y a los mencionados tonos cromáticos.
Mecánicamente, sin embargo, no existe ninguna diferencia. El pequeño cuadriciclo, que no alcanza los 500 kg de peso (sin contar la batería) equipa un motor eléctrico de apenas 8 CV de potencia, alimentado por una batería de iones de litio 5.5 kWh de capacidad que le otorga una autonomía homologada de 75 km. El Opel Rocks-e, además, alcanza una velocidad máxima limitada a 50 km/h, cargándose completamente en un máximo de 3 horas en un enchufe convencional.