Volkswagen quiere ser el líder mundial de la movilidad eléctrica.
La conversión de la planta en un centro de movilidad eléctrica ya ha empezado. Se calcula que las inversiones en la planta suman cerca de 1.000 millones de euros y el primer SUV compacto eléctrico, el ID.4, se produciráa partir de 2022.
Incluso durante la crisis del coronavirus, la marca Volkswagen ha seguido avanzando de forma consistente en la transformación de sus plantas para la movilidad eléctrica, de acuerdo con sus planes. La conversión de la planta de Emden ya ha empezado y los primeros coches eléctricos saldrán de la línea de producción a partir de 2022. Ralf Brandstätter, consejero delegado de la marca Volkswagen, dijo: "Con la conversión de nuestra planta de Emden en un centro de producción para vehículos eléctricos, Volkswagen está forzando el ritmo del cambio sistémico. En total, la compañía invertirá cerca de 1.000 millones de euros en la transformación de la fábrica. Emden se convertirá en la piedra angular de nuestra estrategia eléctrica". Por su parte, Bernd Osterloh, presidente del Comité de la Empresa General, precisó que "nuestra plantilla en Emden tiene un vínculo especial con la planta. Esto se ha confirmado con los recientes movimientos de personal. Estoy convencido de que el Passat, el Arteon y el ID.4 serán un éxito tremendo para el equipo. Se trata de un buen mix de producto para un buen centro productivo".
Emden será la primera planta de Baja Sajonia en la que se producirán grandes volúmenes de vehículos eléctricos. El nuevo SUV compacto eléctrico ID.4 se empezará a producir en esta factoría a partir de 2022, y le seguirán otros modelos completamente eléctricos. La producción de las versiones berlina y Variant del Passat, del Arteon y del nuevo Arteon Shooting Brake continuarán durante un periodo de transición de varios años. En la última fase, la planta tendrá una capacidad de producción de hasta 30.000 vehículos eléctricos por año.
El núcleo de este proyecto de conversión es la construcción de una nueva nave de 50.000 metros cuadrados, donde solo se ensamblarán vehículos eléctricos. Los talleres de carrocería y prensado también se ampliarán en 23.000 metros cuadrados. El taller de pintura se modernizará y se construirá una nueva nave "bicolor", con un área de 6.000 metros cuadrados, para pintar de negro los techos de los vehículos (el acabado de dos colores es uno de los distintivos de la familia ID). Está previsto que los edificios se completen de aquí al verano de 2021.
En el transcurso de los próximos años, también tendrá lugar una ofensiva de formación para todos los empleados de la planta. Esta comenzará con una jornada de sensibilización sobre la temática del "Cambio a la movilidad eléctrica", y se completará con formaciones individuales cerca de la línea de producción. En total, los empleados de la planta habrán completado más de 60.000 días de formación para cuando empiece la producción.
Volkswagen quiere ser el líder mundial de la movilidad eléctrica. Para 2025, la marca tiene previsto lanzar más de 20 modelos totalmente eléctricos y ayudar a que el coche eléctrico consiga penetrar en el mercado. El ID.4 y el ID.3 son hitos importantes en el proceso de lograr un balance neutro en emisiones de CO2 para la marca de aquí a 2050, partiendo de los objetivos del acuerdo de París sobre el clima. Para 2025, las emisiones de carbono de la flota de Volkswagen tienen que reducirse en una tercera parte. Hasta 2024, la marca invertirá cerca de 11.000 millones de euros en movilidad eléctrica, y ya está transformando un gran número de plantas.