MARCA UN ANTES Y UN DESPUÉS
El Mercedes-Benz Vision EQXX quiere llevar al coche eléctrico un paso más lejos, y lo demuestra con récords como recorrer 1.200 kilómetros sin parar a recargar.
Uno de los mayores problemas sobre los coches eléctricos es la autonomía que, junto a unos tiempos de carga largos, hacen que sean muchos los escépticos hacia esta tecnología. Marcas como Mercedes-Benz son consciente de ello, y es por eso que están llevando a cabo prácticas con vehículos como el Vision EQXX, eléctrico que ha batido un récord tras recorrer 1.200 kilómetros sin parar a recargar.
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Concretamente ha cubierto un total de 1.202 kilómetros desde Stuttgart hasta Silverstone, Reino Unido. Y es que aunque bien es cierto que hace no mucho consiguió recorrer 1.008 kilómetros, pero ahora ha ido más lejos al cubrir un kilometraje más propio de un coche diésel que de un eléctrico pero, ¿a qué precio?
En teoría, el Mercedes-Benz Vision EQXX promete un consumo inferior a los 10 kW a los 100 kilómetros, y así lo ha corroborado. Y es que durante el trayecto de más de 1.200 kilómetros, la berlina germana ha registrado un consumo medio de 8,3 kW a los 100, así como una velocidad media de 83 km/h.
En total fueron 14 horas y 30 minutos de viaje, tiempo en el que el EQXX atravesó Francia pasando cerca de Estrasburgo y para poner rumbo poco después hacia Calais, donde cogió el Eurotúnel para llegar a Inglaterra. Una vez en Silverstone, la berlina eléctrica acudió al circuito donde le esperaba el piloto Nyck de Vries.
Fue allí donde de Vries consiguió llevar al Vision EQXX hasta los 140 km/h, ayudando también a completar los 1.202 kilómetros que consiguió cubrir sin parar a recargar. Y es que tras las 11 vueltas en circuito, un breve recorrido por los alrededores de Londres y el resto de la travesía, la berlina de Mercedes-Benz puso punto y final al viaje con un 1% de batería.
Todo ello fue, además, con el aire acondicionado encendido, cuya influencia negativa sobre la autonomía fue ínfima según el estudio de los ingenieros de la firma de la estrella. Hay que sumar también una batería de 100 kWh de capacidad y un coeficiente de arrastra de tan solo 0,17. Sin embargo, no se espera que esta tecnología llegue a un coche de producción de Mercedes-Benz hasta 2025.