Un problema para los usuarios de coches eléctricos
Los coches eléctricos cada vez son más populares, pero no por ello dejan de tener ciertos inconvenientes o problemas en su uso
La llegada de nuevas tecnologías ha provocado un aluvión de novedades en el terreno de la movilidad eléctrica, permitiendo que buena parte de los fabricantes de automóviles comiencen a apostar seriamente por el uso de la electricidad para sus nuevas creaciones. El uso de coches eléctricos está cada vez más extendido, pero no por ello dejan de contar con ciertos inconvenientes.
Uno de los más evidentes es la ausencia de suficientes puntos de carga, lo que hace que muchos posibles compradores de coches eléctricos decidan renunciar a esta tecnología por miedo a no poder moverse con la suficiente libertad. Sin embargo, es cierto que en los últimos mese estamos asistiendo a un avance continuo e intenso en la instalación de puntos de carga rápida, que permiten recuperar autonomía en poco tiempo, permitiendo así largos viajes por carretera.
La carga rápida tiene, eso sí, dos inconvenientes. Uno es la mayor degradación que provoca en las baterías, un punto cada vez menos importante debido a los avances en las tecnologías empleadas en la fabricación de éstas, y el segundo es el precio de las recargas, donde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha alertado de posibles gastos excesivos.
Y lo ha hecho elaborando un estudio en el que ha comparado el precio y el coste de las recargas de 50 puntos de carga repartidos por toda la geografía nacional, un estudio que ha arrojado interesantes resultados. El primer punto clave es que las recargas domésticas o aquellas en puntos de carga “lentos” siguen siendo de lo más interesante, ya que su coste es muy muy reducido.
El problema principal lo encontramos en las recargas rápidas y ultra rápidas, donde el precio por kWh oscila entre los 0.30 y los 0.79€, cantidades que, especialmente en el caso de las recargas más caras, suponen un coste muy alto de cara a un desplazamiento con un coche eléctrico. Tanto, que la OCU alerta de que realizar un viaje Madrid-Barcelona con un coche eléctrico utilizando éstas recargas supone un coste que puede llegar a superar el de un coche con motor térmico.
Si tomamos un consumo medio de energía de unos 18 kWh/100 km en circulación por autopista, nos encontramos con que el coste para recorrer 100 km se dispara hasta los más de 14€, un coste altísimo si tenemos en cuenta que un motor de gasolina actual consume aproximadamente unos 6-7 litros/100 km en carretera, que con el precio del litro rondando los 1.3€ no llega a 10€ cada 100 km.