Accumotive no ha podido satisfacer toda la demanda
En total se espera que sean tres meses los que acumule en cuanto al retraso Mercedes-Benz en el lanzamiento de su primer SUV eléctrico al mercado.
A pocos meses de su debut en los concesionarios, el MercedesEQC sigue siendo sometido a cientos de pruebas para comprobar que todo se encuentra en su sitio en lo que será el SUV eléctrico de la firma de la estrella. Los ingenieros y técnicos de la marca se han desplazado hacia el norte con el objetivo de poner algunos prototipos del EQC al límite sobre nieve y en temperaturas gélidas, con el objetivo de comprobar elementos vitales como el aislamiento, la gestión térmica de la batería, la recarga en condiciones de mucho frío, el comportamiento del vehículo o el correcto desempeño del recuperador de energía.
Aunque se esperaba que las primeras entregas llegaran a sus clientes finales de este mismo 2019, los últimos informes apuntan a que esto se podría retrasar al menos tres meses después de que la factoría de Bremen haya sufrido ciertos retrasos que han obligado a posponer el inicio del ensamblado hasta el inicio del verano.
Este problema con los tiempos de entrega inicialmente previstos viene como consecuencia, según el medio Carscoops, por una necesidad de Accumotive, empresa subsidiaria de Daimler y proveedora de las baterías, de aumentar la producción para satisfacer la demanda. Aunque no ha habido comunicación oficial acerca de cómo afectar el retraso a toda la producción, se espera que algunos clientes VIP sí puedan empezar a recibir sus unidades en los próximos meses, concretamente para junio, aunque todo apunta a que la mayoría deberá esperar hasta noviembre.
Recordemos que el Mercedes EQC es la gran apuesta de los de Stuttgart para plantar cara al Audi e-tron. Con 404 CV de potencia y tracción total gracias a sus dos motores eléctricos alimentados por una batería de 80 kWh que permite una autonomía total superior a los 400 kilómetros. Curiosamente, los rivales del EQC también han sufrido ciertos retrasos en sus hojas de ruta, con el e-tron dilatando su lanzamiento para realizar calibraciones de última hora, el Jaguar I-PACE también sufrió problemas con el suministro de baterías.