La versión definitiva del SUV se desvelará en el mes de diciembre de este mismo año
El modelo entra en la última fase de su desarrollo. Desde la casa inglesa prometen un SUV cómodo, a la par que deportivo y prestacional.
Es, sin lugar a dudas, uno de los lanzamientos más esperados del año. Su llegada se espera en el mes de diciembre, pero, como antesala, el fabricante inglés sigue dando información sobre el DBX, el primer SUV de la marca de Gaydon.
En esta ocasión, se ha confirmado el propulsor que equipará. No es una sorpresa que sea el V8 biturbo de 4.0 litros de la casa británica y de origen Mercedes-AMG, pero sí que estire su potencia hasta los 550 CV y 700 Nm, situándose en la escala de modelos de Aston Martin por encima de deportivos como el DB11 o Vantage, ambos con 510 CV.
La puesta a punto está siendo uno de los pilares de la marca en el desarrollo del SUV. De hecho, la presencia del DBX en el trazado de Nürburgring Nordschleife es constante y Aston Martin ha confirmado que el modelo alcanza regularmente tiempos de vuelta por debajo de los 8 minutos. Para hacernos una idea de este ‘crono’, recientemente, Porsche ha logrado un tiempo de 7 minutos y 42 segundos con el Taycan en el mismo circuito.
Pese a que ya se han fabricado unidades pre-serie del SUV, el programa de desarrollo del DBX sigue su curso, situándose como el más largo en la historia del fabricante, en cuanto a régimen de pruebas se refiere. De hecho, en cifras, el modelo ha conseguido velocidades de giro a la par que el Vantage e, incluso, cifras de frenado mejores que el DBS Superleggera, el 'summum' de Aston Martin. También se han revelado datos referentes a su velocidad máxima. En las pruebas realizadas al SUV ha alcanzado cifras cercanas a los 290 km/h, pero todavía no se ha desvelado cual será su 0 a 100 km/h.
Los ingenieros de Aston Martin han puesto especial hincapié en el sonido del modelo, con la incorporación de un escape que promete emociones fuertes. Este se podrá variar en función del modo de conducción elegido por el conductor. Con el lanzamiento del DBX, la premisa del fabricante inglés es tener en el mercado un SUV práctico y cómodo, a la par que obtenga niveles de rendimiento equivalentes a los superdeportivos de la marca inglesa. El tiempo dará la respuesta.