DEL 23 AL 26 DE JUNIO
Lo podremos ver en el Festival de Goodwood a finales del mes de junio, en una primera versión seguramente muy lejana a la de 2030.
Lexus sorprendió hace algunas semanas al confirmar que se encontraba en el desarrollo inicial de un nuevo superdeportivo llamado a ser el sucesor espiritual de su LFA. Seguramente no muchos encontraron llamativo que se tratara de un modelo alimentado por baterías, aunque sí seguramente pilló a más de uno con el pie cambiado fue el anuncio de que su llegada no se produciría hasta finales de la década. ¿Qué fabricante iba a anunciar un modelo que no llegará hasta 2030? Simplemente Lexus.
El fabricante japonés tiene suficiente confianza en sus planes y en sus productos como para empezar a crear con tanta antelación ‘hype’ con lo que será su primer supedeportivo eléctrico, conocido como Electrified Sport concept, algo que además deja a la marca con la obligación de cumplir con las expectativas con el que será su gran estandarte de nueva generación, sino que también anticipa que difícilmente veremos modelos de corte tan deportivo entre el catálogo de la firma asiática en los próximos años.
Queda por delante un trabajo muy largo para Lexus en el desarrollo de este vehículo, aunque ya se ha confirmado que será en el próximo Festival de la Velocidad de Goodwood (del 23 al 26 de junio) cuando podremos ver rodar el primer prototipo del mismo. Compartirá protagonismo con dos todocaminos de la compañía, el SUV eléctrico Lexus RZ450e y el Lexus UX 300e, pero evidentemente será el deportivo alimentado por baterías el que se encargará de robar todo el protagonismo ante las dudas que puede generar que Lexus sea capaz de lanzar un automóvil capaz de recuperar la esencia del Lexus LFA sin su potente motor térmico.
Por el momento, su imagen parece romper prácticamente con todo el lenguaje de diseño que están empleando los deportivos eléctricos de esta primera parte del Siglo XXI, los cuales suelen optar por diseños compactos en los que se centraliza mucho el reparto de pesos para asemejarse al comportamiento de un deportivo de motor central. En el caso del Lexus, es cierto que hay pocos voladizos tanto delante como atrás, pero sí que se puede ver un capó muy largo que parecería más propio de un deportivo japonés de los 70-80 que de un eléctrico de 2030.
No se podrá ver todo el potencial prometido en los terrenos del Lord March, ya que difícilmente se dará la condición para que pueda poner a prueba que es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en el rango de los segundos y que además contará con una autonomía entre recargas de más de 700 kilómetros. No será la única estrella que se podrá ver debutar en Goodwood. Aprovechando que la pandemia afectó especialmente a los Salones Internacionales del Automóvil, se espera que esta sea una fecha de relanzamiento de la industria, estando presentes proyectos tan interesantes como el Prodrive P25 (la versión moderna del Subaru Impreza 22B), el Genesis X Speedium Coupé o las opciones de que veamos exprimir toda la potencia del Mercedes-AMG One y del Porsche 718 Cayman GT4 ePerformance.