UN 911 PERSONALIZADO PARA LA AVENTURA

Porsche lleva al límite a su 911 en uno de los lugares más duros del planeta

Dos unidades experimentales del 911 ascendieron las escarpadas laderas de Ojos del Salado, en Chile, el volcán más alto del mundo. Los tests se han realizado donde no hay carreteras, donde el aire es escaso, donde la temperatura está muy por debajo del punto de congelación e incluso donde la vida vegetal no existe.

Un equipo liderado por el piloto de resistencia y aventurero Romain Dumas, se ha propuesto ver hasta dónde es capaz de llegar el 911 y ha optado por uno de los lugares más duros del mundo para comenzar la aventura: las escarpadas laderas de Ojos del Salado, en Chile, el volcán más alto del mundo.

Durante casi 60 años, el Porsche 911 se ha llevado al límite tanto en circuito como en la carretera. Ahora, se está escribiendo un nuevo capítulo con la prueba de dos unidades experimentales de un 911 único. Los tests se han realizado donde no hay carreteras, donde el aire es escaso, donde la temperatura está muy por debajo del punto de congelación e incluso donde la vida vegetal no existe. Y, en ese terreno, un Porsche 911 se ha convertido en uno de los pocos vehículos de cualquier tipo en haber alcanzado una altitud tan extrema.

El Porsche 911 personalizado en la escalada del volcán más alto del mundo | Porsche

Para llegar a los 6.007 metros (19.708 pies), el 911 con Romain Dumas al volante superó pendientes muy pronunciadas y zonas de hielo que pusieron a prueba las aptitudes tanto del coche como del equipo que lo acompañaba, en temperaturas de unos 30 grados centígrados bajo cero y con la mitad de oxígeno en el aire que a nivel del mar. El test se completó con éxito y el equipo quedó fascinado por la experiencia.

“Ha sido una aventura memorable y especial, en un lugar tan hermoso como brutal. Para el equipo se trataba de aprender y, desde el primer momento, el coche se ha visto que era resistente y ágil”, comenta Romain Dumas, piloto del 911 y líder del equipo.

Porsche 911 | Porsche

Frank-Steffen Walliser, Vicepresidente de Arquitectura Completa de Vehículos en Porsche AG, encargó el proyecto a su ingeniero Michael Rösler, responsable del Porsche 911. "Ha sido genial crear un 911 como nunca antes se había visto, un coche hecho posible por un pequeño equipo de entusiastas de la ingeniería. El 911 ya se ha probado a fondo en circuito y, por supuesto, en carretera, pero con este proyecto estamos cambiando el enfoque hacia terrenos inexplorados”, explica Rösler, Director de la Gama 911.

Un Porsche 911 muy especial | Porsche

La base de cada unidad era el 911 (tipo 992) Carrera 4S, equipado con un motor bóxer de seis cilindros turboalimentado de serie, que desarrolla 450 caballos de potencia, acoplado una caja de cambios manual original de siete velocidades. Esta base demostró ser excelente, gracias a la combinación de una construcción de chasis robusta y a la vez ligera, una corta distancia entre ejes, una potencia elevada y la capacidad de hacer frente a altitudes extremas.

El Porsche 911 en plena aventura | Porsche

Las dos unidades se equiparon con barras antivuelco, asientos de fibra de carbono y arneses, para cumplir los requisitos de seguridad que exige un proyecto así. A continuación, se añadieron ejes pórtico para aumentar la distancia al suelo (ahora de 350 mm). Las nuevas relaciones de cambio, más cortas, permitieron acelerar con precisión y suavidad a baja velocidad y funcionaban bien con los grandes neumáticos todoterreno recién montados. Además, los coches estaban equipados con una protección especial para los bajos hecha de fibra de aramida, ligera pero extremadamente resistente, que resbala sobre las rocas.

Porsche 911 | Porsche 911

También, se añadió un dispositivo llamado Porsche Warp-Connecter. Diseñado originalmente para aplicaciones de competición, forma un enlace mecánico entre las cuatro ruedas para permitir una carga constante en ellas, incluso cuando están en los extremos del recorrido de la suspensión. Esto hace posible una capacidad de tracción máxima.

El sistema de refrigeración también tuvo que desplazarse hacia arriba para que el coche pudiera afrontar los tramos más agrestes sin sufrir daños. Como toque final, la carrocería se terminó con dos decoraciones distintivas: una con el mismo patrón de colores de Porsche Motorsport que adorna el 963 LMDh y una segunda con temática del 911 realizada por el equipo de diseño de Weissach.

Porsche 911 | Porsche

Proyectos como este son vitales para los que trabajamos en Porsche. Al comenzar el viaje, el equipo apuntó literalmente a lo más alto. Espero que haya sido la primera de muchas otras aventuras”, concluye Walliser.

Porsche 911 al límite | Porsche