EL PRIMER ELÉCTRICO DE ROLLS-ROYCE
El primer coche eléctrico jamás fabricado por Rolls-Royce cobra vida bajo el nombre de Spectre y promete ser el coupé más lujoso del mercado
Rolls-Royce se adentra en la era del coche eléctrico con el descubrimiento del Spectre, su primer modelo diseñado única y exclusivamente para ser eléctrico. Se trata de un importante movimiento por parte de la firma británica, un lanzamiento con el que Rolls-Royce adelanta a todos sus rivales dando vida a un enorme coupé de altos vuelos que pretende tomar el pulso al mercado del automóvil de lujo en su visión del vehículo eléctrico. Heredero natural del Wraith, el Rolls-Royce Spectre es en realidad un coche inédito en la historia de Rolls.
En las instalaciones del Rolls-Royce en Goodwood han diseñado una nueva arquitectura de aluminio totalmente específica para dar a la luz al Spectre. Este coche eléctrico representa un antes y un después en la historia del constructor, pues de hecho no comparte componentes con el resto de la gama Rolls. Su tamaño es realmente importante con una longitud que alcanza los 5.453 mm, ofreciendo una considerable batalla de 3.210 mm.
Su diseño, por contra, sí guarda una estrecha relación con la línea estilística del constructor, evolucionando los característicos rasgos de modelos como Ghost o Cullinan, pero adaptándolo a las nuevas necesidades que impone el coche eléctrico como ha sido el hecho de mejorar sensiblemente su aerodinámica. Tanto es así que el exterior del Spectre se ha cuidado al milímetro para conseguir un CX de solo 0,25, siendo de lejos el Rolls-Royce con mejor aerodinámica de la historia e integrando cambios tan importantes como el rediseño del emblema de la casa, el conocido como "espíritu del éxtasis".
El diseño del habitáculo se ha realizado a partir de una exquisita combinación de lujo, clasicismo y tecnología. El Spectre no supone una revolución con respecto a lo ya visto en otros Rolls, pero sí aporta mejoras y nuevas ideas en pos de ofrecer una visión de lujo más moderna y actual. Prueba de ello es la presencia de 4.796 leds en el interior, para emular la imagen de un cielo estrellado de noche.
Desde el punto de vista técnico, el Rolls-Royce Spectre hace uso de dos motores eléctricos capaces de ofrecer una potencia máxima de 589 CV y un par máximo de 900 Nm. Cifras más que respetables, pero necesarias para mover los 2.975 Kg que pesa este coupé. Solamente su batería de iones de litio con 100 kWh de capacidad ya es responsable de 700 Kg del peso total, lo que no quita para que el Spectre pueda hacer el 0-100 Km/h en apenas 4,5 segundos y conseguir una autonomía estimada de 520 Km.