Así visualiza BMW los deportivos del mañana
Este concept nos muestra cómo se imagina la marca bávara el futuro de sus modelos: eléctricos, autónomos, conectados… pero sin renunciar al placer de conducir.
BMW ha desvelado en el evento #NEXTGen el Vision M Next, un prototipo que muestra la tecnología que veremos en los próximos años en todos los modelos de la marca alemana. Nacido bajo la fórmula D+ACES, hace referencia a los siguientes términos: diseño, conducción autónoma, conectividad, electrificación y servicios, unas siglas que son una declaración de intenciones.
En la presentación del concept, BMW no ha querido perder la esencia de la marca. Por ello, este prototipo ha sido concebido bajo el ADN de los deportivos del fabricante. Silueta baja, elementos de diseño reconocidos, puertas de ala de gaviota y un concepto que hace referencia a modelos míticos Turbo de BMW y al híbrido i8.
El alma del Vision M Next es un sistema de propulsión híbrido enchufable (PHEV). Cuenta con dos motores eléctricos, situados en el eje delantero y trasero que, permiten una tracción trasera puramente eléctrica o total. El motor de combustión es un potente propulsor gasolina de cuatro cilindros y 600 CV. De este modo, la aceleración de 0 a 100 km/h se cifra en menos de tres segundos. Otra de las características del concept es que cuenta con una autonomía eléctrica de 100 km, una cifra que dobla la autonomía de los PHEV actuales.
BMW ofrece con este prototipo dos conceptos muy diferentes. Por un lado, ‘Ease’ se centra en la conducción autónoma donde el vehículo se transforma en un espacio habitable sobre cuatro ruedas. Por otro lado, ‘Boost’, busca todo lo contrario: poder disfrutar de la conducción.
Unas líneas que evocan al futuro y al pasado
Hablar del estilo y diseño del Vision M Next es casi una obligación. De entrada, visualmente llama la atención el contraste de colores. La parte delantera y trasera están acabadas en una tonalidad naranja mate, que produce un contraste con el gris metalizado que recorre el cuerpo de este BMW.
En el frontal vemos la parrilla característica de doble riñón de la marca con un innovador sistema de iluminación faros láser. Las grandes tomas de aire y el spoiler delantero, de fibra de carbono, confiere al concept una estética de coche de competición.
La zaga se caracteriza por la acentuada anchura del vehículo. De nuevo, encontramos una firma lumínica destacada que, según la propia BMW, hace referencia a un modelo mítico como es el M1.
Un interior que fusiona coche y conductor
El Vision M Next cuenta con tecnología de reconocimiento facial, que permite abrir el prototipo a medida que el conductor se acerca a él. Al presionar el sensor táctil, sus puertas en forma de ala de gaviota dejan paso a un habitáculo elegante y minimalista.
La incorporación del Pod Boost -así lo define la marca- es un concepto que busca fusionar coche y conductor, al reunir todas las opciones de control e información a través de tres niveles visuales en el campo de visión del conductor.
El primer plano está formado por el volante, dispuesto horizontalmente con dos pequeñas pantallas. En la línea de visión del conductor, se encuentra una pantalla de cristal curvado, un nuevo elemento cuya superficie transparente se extiende alrededor del volante como una visera. La pantalla de realidad aumentada en el parabrisas constituye el tercer plano. De esta forma, todo sucede directamente en el campo visual del conductor.
Los ajustes de conducción pueden modificarse en el volante, mientras que la información referente a las revoluciones, velocidad, gestión de la energía, frecuencia cardíaca del conductor o la disponibilidad del modo BOOST+ -pulsando un botón permite liberar energía adicional- se reparten entre un total de cinco áreas de información en la pantalla de cristal curvado situada detrás del volante.