Pandemia de coronavirus
AstraZeneca rebaja al 76% la efectividad de su vacuna en su estudio de EEUU
Las autoridades estadounidenses instaron a AstraZeneca a revisar sus datos de efectividad que apuntaban a un 79% porque podía haber "información desactualizada de ese ensayo".
La empresa farmacéutica AstraZeneca rebajó del 79% al 76% la eficacia de su vacuna contra el coronavirus en la actualización de un estudio en Estados Unidos después de quelas autoridades de este país la instasen a revisar los datos iniciales.
Los resultados, muy parecidos a los originales, también indican una efectividad del 85% contra casos sintomáticos de COVID-19 entre los mayores de 65 años y del 100% contra casos graves de la enfermedad u hospitalizaciones.
El estudio se elaboró con 32.449 voluntarios en Estados Unidos, Chile y Perú que recibieron o bien dos dosis de la vacuna de AstraZeneca o un placebo. En un comunicado, el vicepresidente ejecutivo de AstraZeneca, Mene Pangalos, afirmó que "el análisis principal es consistente con el análisis provisional publicado anteriormente y confirma que la vacuna COVID-19 es altamente efectiva en adultos, incluidos los de 65 años o más".
También reiteró que la compañía tiene intención de solicitar a las autoridades estadounidenses una autorización de emergencia para distribuir la vacuna en su país. El lunes, AstraZeneca anunció que su vacuna era eficaz en un 79%, algo que la Casa Blanca describió como "alentador".
Sin embargo, un panel de expertos independiente que asesora al Gobierno del presidente Joe Biden expresó su preocupación al señalar que los datos utilizados para el estudio podían estar desactualizados y notificó de ello a las autoridades.
En consecuencia, el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos (NIAID, en inglés), que dirige el doctor Anthony Fauci, instó a AstraZeneca a trabajar junto al panel de expertos "para revisar los datos de eficacia y garantizar que estas cifras de eficacia más precisas y actualizadas se hagan públicas lo antes posible".
La semana pasada países europeos como Alemania, Francia, Italia o España suspendieron por unos días el uso de la vacuna de AstraZeneca tras detectarse trombos en algunas personas que la habían recibido.
Estados Unidos ha comprado 300 millones de dosis de la vacuna de AstraZeneca, aunque todavía no ha autorizado su uso. Con las dosis adquiridas a Pfizer, Moderna y Johnson and Johnson tiene de sobra para toda su población.
No obstante, la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, confirmó el lunes que si los reguladores estadounidenses dan luz verde al uso de AstraZeneca, esa vacuna se "incorporará al proceso de distribución" junto a las ya aprobadas.
De hecho, el Gobierno de Estados Unidos tiene almacenadas decenas de millones de dosis de AstraZeneca a la espera de su autorización y la semana pasada aprobó compartir 2,5 millones de dosis con México y 1,5 millones con Canadá.