GUÍA PARA EVITAR LA ACRILAMIDA EN LA COCINA
Trucos para cocinar sin que los alimentos produzcan acrilamida, la sustancia potencialmente cancerígena
A partir de este miércoles las patatas fritas o las tostadas deberán reducir la presencia de acrilamida. La sustancia, que puede generar cáncer, se produce al someter a los alimentos a altas temperaturas, sobre todo los que llevan almidón. Así es cómo hay que cocinar en casa produciendo la mínima cantidad posible.
Las croquetas, las patatas fritas o las tostadas hacen que la vida valga la pena, pero hay que tratarlas bien o nos castigarán con acrilamida.Es una sustancia que puede producir cáncer y que aparece al freír, asar o tostar alimentos que contienen almidón.Es decir, patatas fritas (de bolsa o de las normales), pan y tostadas, cualquier rebozado, cereales o galletas. Le declaramos la guerra a la acrilamida con estos trucos caseros:
PATATAS FRITAS
- No guardarlas en la nevera porque el frío estimula esta sustancia
- Lavar las patatas antes de freírlas también ayuda
- Freír a baja temperatura, no más de 175 grados
- La clave es no dorar demasiado. Ese es el mejor indicador: a más dorado más acrilamida
PAN TOSTADO
- No tostar durante más de dos minutos
- Cuanto menos dorado, mejor
CROQUETAS O CUALQUIER REBOZADO
- Freír a baja temperatura
- No dorarlas demasiado
- Limpiar el aceite: las migas sueltas que se requeman son acrilamida elevada a la máxima potencia