QUERÍAN MOSTRAR AL MUNDO QUE LA UNIÓN HOMOSEXUAL SIGUE SIENDO MINORITARIA
El cáncer trunca la boda de dos lesbianas en 24 países
Una boda celebra el amor entre dos personas. Así lo han visto las dos artistas holandesas Fleur Pierets y Julian Bloom. Ellas ya se han casado en cuatro ciudades, y su intención era repetir su enlace en 24 países. Todos con una característica en común: la legalidad del matrimonio homosexual. El objetivo de su proyecto era mostrarle al mundo que la unión entre personas del mismo sexo es aún un hecho minoritario. De su experiencia querían sacar un documental y un libro.
La primera boda tuvo lugar en Nueva York. De ahí, se fueron a París, Amsterdam y Amberes. Su siguiente destino iba a ser Madrid... pero no han podido continuar con el proyecto. A Julian Bloom le han detectado un cáncer en fase terminal y los médicos le dan tan solo una esperanza de tres meses de vida.
Con esta terrible noticia se ha puesto fin a las bodas. Ahora prefieren centrarse en el poco tiempo que les queda juntas, y aunque no puedan completar su desafío de 24 enlaces, si que han conseguido denunciar la dura realidad a la que el colectivo LGTB se enfrenta cada día.