UN MERECIDO PREMIO POR SU GRAN TRABAJO
Denis Mukwege y Nadia Murad, los Nobel de la Paz que luchan por acabar con la violación como arma de guerra
Ni Puigdemont, ni Trump ni Kim Jong Un. El premio Nobel de la Paz de 2018 ha sido para dos personas que han luchado por acabar contra la violencia sexual como arma de guerra. Una mujer yazidí que fue esclava sexual de Dáesh en Irak y un médico congolés que se dedica a reconstruir los genitales de mujeres violadas por guerrillas.
En su consulta le reciben como a un héroe. El congolés Denis Mukwege ha salvado a más de 45.000 mujeres después de que sufrieran las violaciones más atroces. "Después de violarla, dispararon sobre sus genitales". Así confesó en Salvados este acto bárbaro que no es una excepción allí.
El doctor ha sido merecidamente galardonado con el Nobel de la Paz. Un honor que comparte con Nadia Murad, una mujer que fue esclava sexual de Dáesh: "Nos tocaron, nos humillaron y nos violaron". Tras huir de sus captores, su activismo ha puesto voz a la barbarie por la que pasan miles de mujeres yazidies.
Con este doble premio, se ha querido reconocer la lucha contra la violencia sexual como arma de guerra.