La Guerra Civil, en 288 grabaciones inéditas: el archivo oculto de la prensa de Hearst sale a la luz

Durante décadas, permanecieron olvidadas en archivos, almacenadas en bobinas de película que pocas veces fueron vistas y que, en muchos casos, jamás llegaron a proyectarse en los cines. Ahora, esas imágenes vuelven a la vida. Un total de 288 grabaciones en blanco y negro, con más de nueve mil metros de película grabada sobre la guerra civil española, han sido digitalizadas y puestas a disposición del público en la web newsreels.net.

Se trata de grabaciones realizadas por la Corporación Hearst, la empresa del magnate de la prensa William Randolph Hearst, que en su momento fueron emitidas en cines estadounidenses o quedaron sin montar. Muchas son inéditas.

El material, donado en 1981 a la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), ha permanecido almacenado durante más de 40 años hasta que en 2016 comenzó un proceso de restauración y digitalización en colaboración con el Packard Humanities Institute, una fundación dedicada a la conservación del patrimonio cultural. Ahora, todo el archivo está disponible al público de forma gratuita.

Un testimonio visual único

Las grabaciones muestran la Guerra Civil en toda su crudeza: bombardeos sobre Madrid, soldados en las trincheras, civiles huyendo, cadáveres en las calles. Pero también retratan la vida cotidiana en tiempos de guerra: mujeres trabajando en fábricas y talleres, niños jugando entre ruinas, campesinos labrando la tierra mientras la guerra los rodea.

Uno de los vídeos más impactantes es el fechado el 23 de diciembre de 1936, titulado 'Madrid bajo asedio. Severo drama de guerra'. En él se observa a familias enteras corriendo hacia los refugios, edificios reducidos a escombros y el miedo reflejado en los rostros de los madrileños.

También se han rescatado grabaciones previas al golpe de Estado, como la proclamación de la Segunda República en 1931, con multitudes celebrando en las calles, y las elecciones de febrero de 1936, donde aparecen políticos como Niceto Alcalá Zamora, Largo Caballero o Gil Robles depositando su voto.

Otra grabación, del 27 de julio de 1936, documenta los primeros días de la contienda bajo el título de: 'España cierra fronteras mientras se desarrolla la revuelta'. En sus imágenes se ven grupos de personas huyendo hacia Francia por Irún, control de pasaportes y soldados en los puestos fronterizos.

El otro lado de la guerra: la propaganda franquista

No todas las grabaciones documentan el sufrimiento republicano. Algunos captan la euforia del bando sublevado: la entrada de las tropas franquistas en ciudades como Gijón, Barcelona o Toledo, con desfiles, banderas y multitudes celebrando la llegada de los vencedores.

Uno de los momentos más significativos del archivo es la grabación del asedio del Alcázar de Toledo, un episodio clave en la propaganda franquista. En esta grabación se pueden ver primeros planos de los militares encerrados junto al general José Moscardó, así como a las tropas del Ejército de África avanzando por la ciudad. También aparece Francisco Franco recorriendo las ruinas de la fortaleza junto a Millán-Astray, el fundador de la Legión.

Otro documento de gran valor es una película de agosto de 1936, en la que el general Queipo de Llano aparece en Sevilla junto a tropas carlistas patrullando la ciudad. También han salido a la luz imágenes de militares republicanos prácticamente desconocidos, como Rafael López-Tienda, quien murió en combate y del que apenas existían fotografías.

Una historia rescatada tras 80 años de olvido

Las grabaciones no solo muestran la guerra, sino también su epílogo silencioso. La última película del archivo, fechada el 29 de marzo de 1939, captura el éxodo republicano tras la caída de Madrid. En ella se ven cientos de personas caminando hacia la frontera francesa, cargando sus pocas pertenencias, muchas de ellas con el puño en alto en un último gesto de resistencia.

La digitalización de este material ha sido un proceso meticuloso. Durante más de 80 años, las cintas han sido conservadas en temperaturas cercanas a los 0 grados, lo que ha permitido su restauración sin deterioro. Sin embargo, muchas de las películas contenían errores de localización y fecha en sus etiquetas originales, por lo que el trabajo de los historiadores ha sido clave para contextualizar cada una de las piezas.

"Hay mucho material, es una joya para cualquier investigador", explica a EFE la historiadora Silvia Ribelles, una de las expertas encargadas del proyecto.

La Universidad de California y el Packard Humanities Institute han hecho posible que estas imágenes, antes inaccesibles, ahora puedan ser vistas por cualquier persona en cualquier parte del mundo. La historia, silenciada durante décadas, vuelve a proyectarse. Y con ella, los rostros de una España dividida: los que ganaron, los que huyeron, los que murieron y los que resistieron.