Kanye West y su "obsesión" con Hitler: quiso nombrar un álbum como el líder nazi

El cantante Kanye West ha declarado su "admiración" por los nazis y por Adolf Hitler abiertamente a su círculo más cercano. Es lo que asegura la CNN, que cita a varias personas que una vez fueron cercanas al artista.

La figura del líder nazi habría fascinado a 'Ye' durante mucho tiempo; tanto es así que llegó a querer nombrar a un disco con el nombre de Hitler. Según un ejecutivo, West creó un ambiente hostil de trabajo empujado por su "obsesión" con él.

"Elogiaría a Hitler diciendo lo increíble que era que pudiera acumular tanto poder y hablaría sobre todas las grandes cosas que él y el partido nazi lograron para el pueblo alemán", afirma este individuo al medio estadounidense.

West habló abiertamente acerca de su experiencia leyendo el 'Mein Kampf', una admiración de la que su círculo más cercano era "plenamente consciente". El álbum que el cantante quería llamar 'Hitler' sería el publicado en el año 2018 bajo el nombre de 'Ye'.

Un exempleado de TMZ llamado Van Lathan Jr. afirma que West ya realizó esta clase de comentarios durante una entrevista en el año 2018. Sin embargo, el medio decidió no incluir las declaraciones del artista. "Ya le escuché decir eso antes en TMZ", insiste, añadiendo: "Dijo algo así como: 'Amo a Hitler, amo a los nazis'. Algo por el estilo. Y lo sacaron de la entrevista por la razón que sea. No fue mi decisión". Otra fuente consultada por CNN confirma la versión de Van Lathan.

Esta noticia llega después de una serie de declaraciones antisemitas y racistas del artista, las cuales le han costado una oleada de críticas y el final de alguno de sus acuerdos publicitarios. Este martes, Adidas anunció que rompía su vinculación con 'Ye', alegando que "no toleran el antisemitismo ni ningún otro tipo de discurso de odio".

Además, Twitter e Instagram han bloqueado los perfiles de West, que decidió comprar la red social Parler, de extrema derecha. West también vistió camisetas con el mensaje 'White Lives Matter' en la semana de la moda en París, en respuesta al movimiento 'Black Lives Matter'.