INVENTOS ENTRE LA VIGILIA Y EL SUEÑO
La bombilla, Frankenstein, la relatividad y otros hitos logrados en duermevela
Después de un largo día en la oficina, llega el momento de meterse en la cama. Nuestra mente comienza a imaginar. Entre la vigilia y el sueño alcanzamos el estado de hipnagogia, la fase más creativa del cerebro. Y el sueño de la razón produce monstruos, si no que se lo pregunten a Mary Shelley. 'Frankenstein', su terrible criatura, le llegó en esa fase del sueño a la escritora después de haber estado hablando sobre los experimentos de Darwin.
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Y no es la única artista que aprovechó sus incursiones oníricas. Surrealistas como Dalí, basaron su obra en los estados alterados de la mente. En este cuadro pinta lo que él domina el auténtico monstruo crisalítico, una cabeza que duerme y se deshace en sus ensoñaciones. Un mundo que llevó incluso al cine, junto a Hitchcock, en 'Recuerda'.
La hipnagogia llevó incluso al avance en el campo de la ciencia. A Einstein se le ocurrió la relatividad durante un sueño. Edison dormía con con unas bolas de metal que le despertaban cuando se le caían de la mano, así, no llegaba a dormirse profundamente y era capaz de recordar lo soñado durante ese estado.
El M.I.T no quiere desaprovechar las oportunidades creativas que se abren en esta fase, por eso ha inventado este guante que monitoriza los estados del sueño. Una vez alcanzada la fase de hipnagogia, un robot susurra: "recuerda pensar en un conejo'', por ejemplo, y así van conduciendo la duermevela del sujeto. Así que si se encuentra en un bloqueo creativo, no le de muchas vueltas, mejor, coja la almohada y déjese llevar.
El caso Rosy
Confesaron haber matado a cuatro personas pero podrían ser inocentes: el libro que ha puesto en duda el sistema judicial italiano
La escritora italiana Alessandra Carati analiza en El caso Rosy las irregularidades que se produjeron en el juicio de 'la matanza de Erba', un crimen que conmocionó su país en 2006