Sant Jordi 2024
Los rosales Kokedama, la forma sostenible de regalar una rosa en Sant Jordi y que dure mucho más
Sant Jordi 2024 espera despertar una campaña de venta de rosas fuerte, dado que es la primera vez que cae en laboral desde pandemia. Los expertos del campo ya han lanzado sus recomendaciones: el rosal Kokedama. ¿Qué es y qué ventajas tiene?
La rosa roja es la opción favorita por Sant Jordi, una festividad que cae en día laboral por primera vez desde pandemia y espera tener una gran acogida. Esto quiere decir que los floritas esperan vender más ramos que el año pasado para así cumplir la tradición de flor y libro. La primera parte de una leyenda y la segunda de un escritor valenciano, impulsor del Día del Libro.
En cualquier caso, la tradición ha ido evolucionando y cada vez se apuesta más por otros colores y tipos de flores. Los expertos, por su parte, recomiendan decantarse por flores más sostenibles que una rosa, un tipo de flor que está dejando de producirse en España. La directora de la escuela de arte floral de Mercabarna-flor, apuesta por la tendencia de Kokedama en rosales. Es más, está segura de que será una de las apuestas fuertes en Sant Jordi 2024.
Qué quiere decir Kokedama
La palabra kokedama significa 'bola de musgo' y es una antigua técnica japonesa que consiste en plantar una planta, en este caso, un rosal de rosa roja. Este topo de planta necesita un riego abundante durante los meses de calor y sólo una vez a la semana en invierno.
Las kokedamas se elaboran a través de una técnica japonesa que literalmente significa 'bola de musgo'. Cuenta la historia que un japonés dedicado a los bonshais desechó uno de ellos y lo metió en una bolsa, y como llevaba los mismos ingredientes, con el tiempo, el musgo junto con la tierra formó una bola dentro de la bolsa, de la que a los meses, descubrió sorprendido que había crecido una planta, explica a declaraciones a Efe un jardinero llamado José Ruiz Hernández.
"La gran diferencia que presentan las kokedamas es la manera de regarlas, que se realiza por inmersión", señaló la citada fuente. A la hora de regarlas se sumerge la bola, expele burbujas y cuando deja de echarlas significa que ya está regada. "La escurres un minuto y ya la puedes poner en una base de piedra, madera, en un vaso, una mesa... Le hace falta una base porque el musgo está húmedo, pero no tira agua como lo puede hacer una planta en una maceta", explica.